Un prodigio en ebullición

Aroa Freije posa con la Copa y la medalla de bronce obtenidas en el Europeo cadete en Bielorrusia. (Foto: Xesús Ponte)
photo_camera Aroa Freije posa con la Copa y la medalla de bronce obtenidas en el Europeo cadete en Bielorrusia. (Foto: Xesús Ponte)

Entrega y sacrificio en estado puro. A sus 14 años, Aroa Freije no encuentra su techo y acaba de conseguir el tercer puesto en el Europeo cadete de pentatlón. La joven lucense posee un currículum envidiable tanto en el plano deportivo como en el escolar.

la palabra fracaso no existe en su diccionario. Su entrega y dedicación absolutas esquivan cualquier tipo de obstáculo. Aroa Freije sigue retándose a sí misma y buscando un techo que todavía no encuentra. A sus 14 años, la joven pentatleta lucense acaba de añadir un nuevo hito a su pequeña pero prolífica carrera deportiva. Aroa Freije viene de proclamarse tercera en el Europeo cadete de pentatlón, que se disputó en Bielorrusia.

La medalla de bronce le sabe a gloria. Una hazaña con la que ni ella misma contaba, después de pasarse gran parte de la temporada en el dique seco. «Realmente no contaba con quedar en el podio sino bastante peor. Acababa de salir de una lesión porque me rompí el radio al caerme de la bici. No me entrené todo lo que me habría gustado y, por eso, me sorprendí bastante a mí misma en Bielorrusia», relata Aroa Freije con una sonrisa de oreja a oreja.

LOS INICIOS
«Empecé en el pentatlón por una amiga»

Aroa Freije todavía recuerda cómo empezó su aventura en el pentatlón. Ya han pasado cuatro años, pero la joven deportista lucense tiene una imagen nítida de su debut. «Empecé por una amiga que me dijo: ‘Tienes que probar, tienes que probar...’ me gustó y aquí estoy ahora. Es duro, pero si te gusta de verdad, se lleva bien», explica Aroa Freije con suma naturalidad. 

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