Un clavo para quitar otro clavo

Juanma (izquierda) y Álex, durante un partido. EPL
photo_camera Juanma (izquierda) y Álex, durante un partido. EPL

El Burela FS se juega hoy en la Comunidad Valenciana su pase a los cuartos de final de la Copa del Rey de fútbol sala. El cuadro naranja se mide a las ocho y media de la tarde al Levante Dominicos, segundo clasificado de la Segunda División y serio aspirante al ascenso a Primera. La eliminatoria se resolverá a único encuentro, con la disputa de una prórroga y lanzamientos de penaltis en caso de que el choque concluya con empate.

El cuadro naranja se presenta en tierras levantinas con la intención de sacarse la espina de su no clasificación para la Copa de España. La derrota en casa ante el Marfil Santa Coloma impidió al conjunto burelés mantener una plaza entre los ocho mejores al final de la primera vuelta y no podrá estar en Logroño, en Marzo, en la fase final. El preparador del cuadro naranja, Juanlu Alonso, cree que es mejor «competir ya» para no comerse demasiado la cabeza con lo sucedido el viernes en el pabellón Vista Alegre. «Particularmente soy de los que pienso que la mejor manera de olvidar todo lo que pasó es jugando otro partido. Ahora la única Copa que nos queda es esta porque la otra no la podemos disputar y debemos aferrarnos a la posibilidad de seguir vivos y alcanzar los cuartos de final», afirmó el técnico.

Juanlu Alonso cree que no será fácil conseguir el objetivo pese a la aparente diferencia de categoría entre los equipos, ya que considera al Levante como «una plantilla de Primera División jugando en Segunda» y además cree que el hecho de que se juegue a partido único, en la cancha del equipo valenciano añade más complicaciones para su equipo. «Espero un partido de máxima dificultad. Los conjuntos de menor categoría siempre salen con una intensidad brutal, a máximas revoluciones y obligan a los rivales a una exigencia grande», añade el preparador del cuadro burelés, que intenta dar las claves para sacar adelante el partido. «Será muy importante controlar la energía extra del rival en los primeros 10 minutos y a partir de ahí intentar imponer nuestro juego habitual», concluyó el técnico madrileño.

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