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Ni Cafés Candelas Breogán ni San Pablo Burgos, los dos equipos que cerrarán la temporada el próximo domingo (12.30 horas) en el Pazo dos Deportes de Lugo, han llegado en buen momento al final de la temporada. Más bien parece que se les ha hecho larga. Así, el conjunto lucense ha perdido los cinco últimos encuentros y su próximo rival solo ha ganado uno en sus cinco últimos compromisos.

Obviamente, esta negativa trayectoria ha tenido nefastas consecuencias para el Breogán en forma de descenso y no tanto para el Burgos, alejado de la zona de play off pero con muchas opciones de poder jugar la próxima temporada en competición europea, el gran objetivo de los castellanos después de su segunda temporada en la Liga Endesa.

Precisamente, mantener la undécima posición que ahora ocupa será la motivación del conjunto que dirige Diego Epifanio. La del Breogán, después del golpe que significó la derrota sufrida en Andorra, que consumaba el descenso, estará en cumplir ante su afición en el último encuentro de la temporada.

La forma en la que el Breogán afrontarán el encuentro, sobre todo por la situación anímica del equipo, no deja de ser una incógnita. Atendiendo a lo que ha sido la temporada, el San Pablo de Burgos no ha sido precisamente un rival de altura en los desplazamientos. De hecho, solo ha conseguido cuatro triunfos, los conseguidos en las canchas de Manresa (83-86), Gran Canaria (74-81), Tenerife (83-88) y Fuenlabrada (80-89).

Los dos conjuntos afrontarán el partido del domingo con ausencias importantes. El conjunto lucense no podrá disponer de sus dos últimas incorporaciones (Ray McCallum y Daniel Ochefu), mientras que en el San Pablo el estadounidense Dominique Sutton cumplirá ante el Breogán su tercer encuentro de sanción de los cuatro con los que le castigó el juez disciplinario de la Federación Española de Baloncesto tras los incidentes que protagonizó en el encuentro ante el Tecnyconta Zaragoza.

Sutton llegó al San Pablo para cubrir la baja de Deon Thompson, quien abandonó en enero el equipo burgalés para enrolarse en el Zalgiris. Pero este no fue el único cambio que registró el Burgos desde el inicio de temporada. En diciembre llegaron los brasileños Augusto Lima y Vitor Benite. Ambos habían empezado la temporada en el Cedevita de Zagreb, que dirigía Sito Alonso. Los problemas en el club croata provocaron la salida de los tres, que enseguida encontraron acomodo en la Liga Endesa, los jugadores como ya está dicho en Burgos y el técnico, en el Ucam Murcia.

Para compensar, tres jugadores abandonaron el equipo. Viacheslav Kravtsov se incorporó al Fuenlabrada, Dino Radoncic al Murcia y Ognjen Jaramaz se marchó cedido al KK Partizán, del que es director deportivo el exbreoganista Nikola Loncar.