¿Sábado de despedidas en el Ángel Carro?

Cerrar el círculo para abrir uno nuevo. Acabar contra el equipo que lo vio nacer como jugador y entrenador antes de mudarse a otro destino donde ejercer. El actual preparador del Lugo, Francisco Rodríguez, será, este sábado (20.30 horas) el juez de un Almería que se juega la vida. Lo hará en el que probablemente sea su último duelo en el banquillo del Ángel Carro, ya que su futuro está lejos del Miño y muy cercano a su tierra, Andalucía.

Francisco vivirá un partido final de su estancia en la ciudad amurallada con la toga puesta. Será el encargado de ajusticiar o prorrogar la estancia del club que le dio la primera oportunidad en el fútbol profesional de primer nivel. El técnico había comenzado en Tercera en el Plus Ultra almeriense en Tercera División antes de firmar por el juvenil del Espanyol. Pero fue en el extinguido Polideportivo Almería con el que dio el impulso definitivo a una prolífica carrera como jugador, donde llegó a jugar en Primera División con el Albacete. Con la UD Almería ejerció de delantero de calidad en dos etapas, entre 2001 y 2004 y entre 2005 y 2007.

Una vez colgadas las botas en enero de 2010, dio el paso a los banquillos en el filial del Almería en 2011, donde realizó una gran labor, lo que le valió para ser el primer equipo en junio de 2013, convirtiéndose en el técnico más joven de la Primera División. Logró la permanencia en la 2013-2014 y fue despedido en diciembre de 2014 a pesar de que el cuadro almeriense no estaba en puestos de descenso.

Tras un periodo sin entrenar, cogió al Ucam Murcia en diciembre de 2017 y toda esta campaña completó un curso notable con el Lugo, con el que logró la salvación más holgada en Segunda División y consiguió ser líder de la categoría de plata -jornada 12- por primera vez en la historia.

Sin embargo, a pesar de que el club contaba con él para volver a ser el rector del Lugo en la 2018-2019 y cumplir el año que le quedaba, el preparador parece haber decidio a cambiar de aires.

Al interés inicial del Málaga se le unió el del Granada, que parece haber ganado la partida para que el almeriense sea su primer técnico la próxima campaña. Queda por dirimir la forma en la que Francisco se libera del compromiso con el Lugo, que podría ser mediante el pago de una cantidad estipulada en su contrato y que en algunos medios se estipula en torno a los 200.000 euros.

VÍCTOR MORENO. Pero la de Francisco podría no ser la única baja en la estructura futbolística del Lugo. El director deportivo, Víctor Moreno, podría haber aceptado la propuesta del Alavés para convertirse en adjunto del leonés Sergio Fernández, máximo responsable del apartado deportivo del club babazorro, que le presentó una buena oferta que el manchego habría barajado seriamente.

El club vasco se encuentra en una fase de expansión, ya que además de su propio organigrama, en el que está el primer equipo, el filial -que milita en Tercera y se encuentra inmerso en el play off de ascenso a Segunda B- y sus categorías inferiores; cuenta con tres equipos extranjeros bajo su control: el NK Rudes croata, el JS Hércules finlandés y su última incorporación: el Sochaux francés.

Por lo tanto, el Alavés y su estructura en la dirección deportiva precisaban de un mayor número de integrantes con responsabilidad y ahí entraría Moreno, que estaría por debajo de Fernández pero con peso en las tareas de scouting y elección para el club babazorro y los otros tres que forman parte del Grupo Baskonia-Alavés.

De hecho, el Sochaux ha contratado como entrenador al berciano José Manuel Aira -quien llevaba desde marzo en el NK Rudes- para que pilote el proyecto del club galo en la Segunda División de Francia. Aira fue el elegido por Moreno para dirigir al Albacete en junio de 2016.

La posible salida de Víctor Moreno supondría un problema para el Lugo, ya que se encontraría sin el elemento imprescindible para poder firmar a un nuevo entrenador y jugadores para la próxima campaña justo en el momento en el que el mercado de fichajes entra en efervescencia, que es a partir del mes de junio.