Arranca la era Albés en el CD Lugo: el técnico vigués dirige su primer entrenamiento

El técnico de 36 años será presentado este jueves
Rubén Albes dirige su primer entrenamiento con el Lugo. SEBAS SENANDE
photo_camera Rubén Albes dirige su primer entrenamiento con el Lugo. SEBAS SENANDE

El CD Lugo ha hecho oficial el fichaje de Rubén Albés como nuevo entrenador del primer equipo tras la destitución de Luis César Sampedro. El entrenador vigués, tras someterse a una PCR, ya pudo dirigir el entrenamiento del conjunto rojiblanco de este martes. 

"Albés (Vigo, 24-2-85) inicia su etapa en el club albivermello como uno de los entrenadores de mayor proyección en el panorama nacional. Wydad de Casablanca, Real Valladolid B, Celta B, UCAM Murcia, o Hermannstadt han sido algunos de los clubes que integran la trayectoria de este joven, pero consolidado técnico gallego", destaca el CD Lugo en un comunicado.

La presentación de Rubén Albés será el próximo jueves a las 13.30 horas y su debut llegará este sábado en El Toralín ante la Ponferradina.

Esta temporada la comenzó en el Hermannstadt rumano, pero en enero llegó a un acuerdo para rescindir su contrato, dejando al equipo en penúltima posición.

QUINIELAS. En las quinielas figuraba también el técnico argentino Ricardo Caruso Lombardi, que el domingo confirmó el interés del cuadro rojiblanco en un canal de televisión de su país. Sin embargo, el vigués Rubén Albés, exentrenador del Celta B, será el cuarto entrenador de la temporada para los lucenses.

Antes de su aventura rumana, Albés, de tan solo 36 años, pasó por el UCAM Murcia, el Celta B o el Valladolid B, entre otros equipos. Su nombre ya sonó tras la destitución de Nafti, aunque en ese momento la directiva optó por Luis César.

DESTITUCIÓN. La destitución del arousano, la tercera de la temporada para el Club Deportivo Lugo, ha generado el enésimo terremoto dentro del club cuando solo faltan siete jornadas para que finalice la competición. Los pésimos resultados cosechados por el técnico de Vilagarcía, que no ha ganado ni uno solo de los ocho partidos que ha dirigido tras la salida de Mehdi Nafti, han empujado al cuadro rojiblanco a su peor situación de la temporada después de haber disfrutado de una relativa tranquilidad en el ecuador del curso, cuando los resultados acompañaban y el francotunecino era el responsable del banquillo.

Los vaivenes tácticos, algo ya tradicional en el Lugo de los últimos tres años, han terminado por marear a una plantilla que en un mismo curso ha desempeñado sobre el terreno de juego hasta tres estilos radicalmente diferentes entre sí, siendo solo uno de ellos, el que imprimió Nafti, el que ayudó al equipo a ocupar posiciones de media tabla a mitad de temporada. De hecho, durante varias jornadas el equipo lucense se puso de moda por la incomodidad que producía su propuesta a los rivales, e incluso se llegó a hablar de las posiciones que daban derecho al play off.

Los cambios, sin embargo, han destrozado por completo la confianza de los jugadores. El bajo nivel exhibido en los ocho partidos con Luis César al frente del banquillo, con goleadas escandalosas incluidas han deprimido a una plantilla que solo ha conseguido reaccionar cuando ha tenido un entrenador con carácter que identifica a la perfección los problemas del equipo. Ocurrió con Juanfran García en el tramo final del curso pasado. Señalado en su llegada por su nula experiencia en los banquillos, el valenciano generó ciertas dudas entre los aficionados del Lugo por ser la primera vez que se sentaba en un banquillo profesional. El técnico, consciente de ello, aseguró nada más llegar a Lugo que lo que necesitaba el equipo no era un entrenador, sino un gestor que supiera tocar la tecla necesaria para devolver la confianza perdida al grupo.

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