Roberto Férnandez sube en el once del Lugo

El cambio menos usual en un equipo cuando hay objetivos aún en juego sucedió en el once del Lugo en Son Moix. El técnico rojiblanco, Luis César Sampedro, decidió un cambio de portero en mitad de la temporada, como había hecho uno de sus precursores en el cargo, Quique Setién, durante sus tres campañas en el cuadro lucense en Segunda División. Roberto Fernández suplió a José Juan bajo los palos en Mallorca como había hecho en los últimos cinco encuentros de la campaña anterior, con el único reto para los del Ángel Carro que sumar puntos sin obtener un rédito más allá de la satisfacción por la victoria. 

Roberto apenas ha dispuesto de oportunidades. Fuera de la Copa del Rey, han sido seis encuentros de 84 disputados. 

Rindió a la perfección el de Chantada, al que aún le resta un año más bajo la disciplina lucense. Mientras, el anterior inquilino de la meta rojiblanca, José Juan, termina contrato y su relación con el club parece que podría poner punto y final en el mes de junio tras cinco años de éxito. 

José Juan ya sufrió el paso de la titularidad al banquillo desde su aterrizaje en el Ángel Carro. Nunca completó los 42 partidos de la temporada en Lugo. 

Con Setién alternó la meta con Yoel Rodríguez para disputar nueve encuentros. La dos campañas siguientes, también a las órdenes del cántabro, se jugó el puesto con Dani Mallo y se lo ganó en 56 duelos. Por último, en la 2015-2016 gozó de la confianza de Milla y José Durán hasta que en el tramo final Roberto ocupó un puesto bajo palos en las últimas cinco jornadas. El de Chantada parece haber adelantado esa situación ocho partidos.