El regreso de un número uno

Como si Gardel llenara de música el aire húmedo y nebuloso del Ángel Carro. Como si el genio argentino pusiera la banda sonora a un lunes por la noche al lado del Miño, con Volver en el corazón de un lucense que sentirá un retorno como una sensación inolvidable, Diego López tendrá de nuevo la hierba del estadio que lo vio nacer como jugador. No son veinte años de soplo de vida, como dice el tango con el bandoneón de fondo. Son 21 desde que el portero de Paradela dejó la ciudad amurallada para labrar una carrera que ningún otro jugador lucense puede igualar en éxitos y prestigio. El lunes (21.00 horas, GolTV) saltará a su antigua casa, con el blanquiazul del poderoso Espanyol, para enfrentarse al Lugo de Nafti.

"Siempre había tenido ganas de jugar en el Ángel Carro, porque es mi casa, mi tierra y mi origen. Ya sentí mucha emoción cuando jugamos aquí en Barcelona contra el Lugo e ir a Lugo siempre es una alegría. Igual no para el Espanyol, porque estamos en Segunda División y me gustaría enfrentarme al Lugo en Primera, pero espero que sea un bonito partido, disfrutar de esa experiencia", aseguró el portero de Paradela.

Su vuelta será especial porque es la primera vez que jugará contra su equipo de formación. Nunca antes lo había hecho. Ahora lo hará en una situación complicada por el covid, sin la mirada orgullosa de su familia en la grada, sin los aficionados que lo admiran como lucense y como futbolista, sin el aliento de su Peña.

"En Lugo están mis raíces, está mi familia, están mis amigos y siempre que puedo voy allí, a Paradela y siempre que voy allí lo disfruto mucho. Da pena que no pueda haber público", valora Diego.

"Cuando bajó el Espanyol pensamos en cuándo se podría ir a verlo al Ángel Carro, pero ahora la cosa está peor que en verano"

La familia del paradelense lo lamenta más que nadie. Uno de sus sueños era volver a disfrutarlo de cerca, en su tierra, en su casa.

"Nunca vino a jugar a Lugo con otro equipo, esta es la primera vez. Cuando estaba en Madrid, en el filial del Real Madrid, en Segunda B, cambiaron la composición de los grupos y no pudo venir a jugar aquí. Y ahora, para una vez que viene, nos toca el virus... Es un retorno un poco chungo, pero qué le vamos a hacer", considera su madre, Lidia Rodríguez.

"Cuando bajó el Espanyol pensamos en cuándo se podría ir a verlo al Ángel Carro, pero ahora la cosa está peor que en verano. Es una pena que pase todo esto, porque este año teníamos varios desplazamientos para poder ir a verlo, podíamos ir a Asturias, Ponferrada… pero es lo que hay", dice el presidente de la Peña Diego López de Paradela, Paco González.

La familia López Rodríguez y los miembros de la Peña tendrán que ver el partido desde sus casas y comunicarse por WhatsApp, cuando en condiciones normales lo harían a un palmo de distancia con el frío calando sus huesos en el Ángel Carro.

"Este partido es especial. Estamos con Diego, porque es nuestro vecino y siempre lo animamos, pero somos de Lugo y queremos que al equipo siempre le vaya bien"

"Para nosotros es un pena que su primer partido en Lugo desde hace tantos años sea de esta manera. No puedes hacer nada. No puedes ir al hotel de la concentración, ni ir al estadio, ni siquiera puedes verlo. Nos tocará ver el partido por la tele. Es una pena", valora Lidia.

"Este partido sería algo especial, pero habrá que conformarse en verlo por la tele. Cada uno lo verá en su casa como pueda, porque tal y como está esto no podemos juntarnos. Cada uno lo veremos por nuestra cuenta y comentaremos el partido por el WhatsApp, no nos queda otra", dice González.

La familia querrá una victoria del Espanyol, porque el hijo siempre tira más que cualquier otra cosa en el mundo. Tampoco en la peña verían con malos ojos esta opción, aunque abogan por un empate a cero que satisfaga al Lugo y a Diego.

"Este partido es especial. Estamos con Diego, porque es nuestro vecino y siempre lo animamos, pero somos de Lugo y queremos que al equipo siempre le vaya bien. El corazón lo tendremos dividido ", dice Paco González.

"Cuando me fui de Lugo hace 21 años ya, mi sueño era ser profesional, jugar en Primera División"

SEGUIMIENTO DEL LUGO. Diego López es un rojiblanco más. No lo será el lunes, pero el resto del año animará al equipo como hace cada día. "Siempre sigo de cerca sus pasos y me alegro mucho de los triunfos del Lugo. Es un rival muy incómodo, muy intenso, muy peligroso en las transiciones, en el balón parado, es un equipo que presiona mucho y que lo pone muy difícil", dice López.

"Cuando me fui de Lugo hace 21 años ya, mi sueño era ser profesional, jugar en Primera División. El Lugo estaba en aquella época en Segunda B, luego bajó a Tercera… Quizás había un desnivel importante entre mis aspiraciones y dónde estaba el club. Pero más que yo no se alegra nadie de lo bien que le ha ido al Lugo, de su ascenso y de todos los años que lleva en Segunda División, que para el club y la ciudad es muy importante ", considera el paradelense.