Recuperar la ilusión en Segunda

La grada no quiere sufrir. No había tenido la experiencia de una campaña al filo de la navaja desde la vuelta a Segunda División en 2012 y comprobó, la pasada temporada, que el padecimiento es mejor dejarlo para otros y vivir el año con tranquilidad. El graderío espera que el Lugo vuelva a rendir como sabe desde hace ocho cursos, que resida en la zona pacífica de la tabla y se olvide de las apreturas, que las esconda en la mazmorra de las pesadillas y que el buen juego conduzca hacia el éxito de la permanencia sin apuros.

La cautela, la definición de un objetivo realista y la salvación como base serán la hoja de ruta a seguir por parte del club, donde la apuesta por el proyecto encabezado por Eloy Jiménez y un equipo para la dirección deportiva con acento lucense será la clave para asegurarse un futuro prometedor para la 2019-2020.

Porque, desde la salida de Quique Setién del banquillo rojiblanco, ningún entrenador había enlazado los meses de junio y julio como técnico jefe del Lugo. Eloy Jiménez será el primero en la era Tino Saqués en repetir en la banda del Ángel Carro después de su gran final de temporada.

La propia plantilla instó a la directiva a renovar a Eloy Jiménez

Bajo el mando del preparador de Hellín, el cuadro rojiblanco logró una salvación que parecía lejana después del 4-0 encajado en Las Palmas. Sin embargo, el manchego fue capaz de convencer a la plantilla, dotó al grupo de la solidez necesaria y supo hacer del equipo un bloque para sacar los puntos suficientes para que el funeral no se produjese. Mantener a Jiménez fue una prioridad para la dirección deportiva y la presidencia. El vestuario y la afición reclamaron que el preparador albaceteño siguiese dirigiendo al equipo y desde los despachos del Ángel Carro colmaron el deseo de todos.

Con el manchego como base del proyecto y una espina dorsal formada por los tres capitanes de siempre —Carlos Pita, Fernando Seoane e Iriome— junto a hombres importantes como Cristian Herrera o Eduard Campabadal, el club rojiblanco espera formar un grupo comprometido y exitoso. Completar el vestuario fue una tarea ardua para Manolo Mandiá y Tino Saqués. A un ritmo más lento que en otras campañas, con el recuerdo de las incorporaciones fallidas del anterior director deportivo, Emilio Viqueira, y con la necesidad de acertar en cada fichaje, los nuevos futbolistas fueron llegando al Ángel Carro.

El técnico albivermello está satisfecho con los fichajes y recuerda que aún faltan refuerzos por llegar

Los tres primeros lo hicieron de una tacada. El mismo día, el club confirmó a Ander Cantero bajo los palos para competir por un puesto con Alberto Varo. Además, zanjó la medular para acompañar a Fernando Seoane con dos jugadores de talento. Jaume Grau y Borja Domínguez dotarán de calidad al centro del campo de Eloy Jiménez. El primero aportará toque, equilibrio, la posibilidad de formar como pivote o mediocentro escoba, de ayudar en la construcción y no escatimar ayudas en defensa. El segundo destaca por su variedad de recursos. Capaz de llevar la manija del equipo, también es hábil para la lle gada desde segunda línea, jugar como volante en distintos sistemas y ofrecer soluciones a su entrenador y compañeros.

Para la zona de arriba aterrizó en Lugo Carlos Castro. Una vieja aspiración lucense, llega con la experiencia de sus años en Gijón, Mallorca y Elche, como alternativa a Cristian Herrera para aprovechar el papel de referencia de Manu Barreiro y aportar gol y asistencias.

Roberto Canella es otro ex del Spórting. El asturiano se disputará la titularidad con Orest Lebedenko en la banda izquierda en un carril de ida y vuelta para el entrenador del Lugo. Además, el club lucense cuenta con el retorno de Gerard Valentín, un multiusos para jugar en la derecha en los dos lados del campo, cerca de los porteros o de los puntas.

El Lugo es, junto a Numancia y Alcorcón, el club más veterano en Segunda esta temporada

Con estos mimbres, el cuadro rojiblanco buscará una temporada de buen juego, de lograr la permanencia lo antes posible, de soñar con algo mejor si se tercia y mantener su estatus en una categoría, la Segunda División, en la que es el gran veterano junto al Numancia y el Alcorcón. Si en lo deportivo se espera una campaña tranquila, en los despachos se buscará que, de una vez por todas, haya calma, que se mantenga al técnico y a Mandiá como secretario técnico y que el Ángel Carro tenga una mejor cara

A la espera de ingresos que permitan mejorar el estadio, la construcción de una grada fija en el Fondo Sur, el cambio de la iluminación y un aspecto más adecuado a la categoría del estadio, pueden ser unos pasos decisivos para la mejora del proyecto global del Lugo.