Cuatro positivos en Granada y el Breogán sigue sin contagiados

El club andaluz avisó del brote mediante un mensaje de texto horas después de detectarse
Los jugadores del Covirán Granada hacen piña en los vestuario antes del partido. FEP
photo_camera Los jugadores del Covirán Granada hacen piña en los vestuario antes del partido. FEP

Todos los jugadores del Río Breogán siguen sin síntomas, después de dar negativas las PCR, mientras en Granada el brote de la final de la LEB Oro del domingo afecta ya a cuatro jugadores y técnicos que disputaron el partido decisivo para el ascenso a la ACB. A medida que pasa el tiempo se van conociendo más detalles de lo ocurrido en las horas posteriores al choque, por ejemplo que Granada tardó varias horas en avisar al club celeste y además lo hizo mediante un mensaje de texto.

La situación en Lugo actualmente es que todos los jugadores foráneos ya se marcharon –salvo el argentino Mateo Díaz, quien además ya pasó el coronavirus hace unos meses, que lo hará este sábado– y los nacionales están autoconfinados y manteniendo las máximas medidas de seguridad. ¿Por qué autoconfinados y no confinados? Pues porque nunca existió comunicación oficial por parte del club nazarí y de la sanidad andaluza.

La mejor forma de entenderlo es realizar un relato lineal de los hechos. El partido se juega el domingo por la tarde. El sábado, los dos equipos pasan control de antígenos y los deportistas dan negativo. Según publicaba este jueves el diario El Ideal de Granada citando fuentes del club nazarí, un jugador local se empieza a sentir mal en la madrugada del domingo al lunes, va a urgencias y le detectan covid. El gabinete de comunicación del Covirán Granada, sin embargo, retrasa esa hora y dice a este periódico que de ese primer contagio se enteraron el lunes por la tarde.

Se hizo un visionado del partido para ver qué jugadores celestes estuvieron más cerca del primer jugador contagiado del Granada

Mientras, los jugadores celestes cenaron juntos y estuvieron hasta las dos de la madrugada en un bar celebrando la victoria, también con algunos aficionados desplazados. Por la mañana viajaron hasta Santiago en avión y por la tarde se dieron un baño de masas en el Pazo y en el Ayuntamiento, desconocedores de que había un brote en Granada.

En la madrugada del lunes al martes, un empleado del Río Breogán recibe un mensaje de texto dando cuenta del positivo. Lo ve por la mañana, cuando se despierta, y avisa al jefe de los servicios médicos, el doctor Luis Coira, que inicia los trámites con Sanidad. Tanto el Río Breogán como el Sergas destacaron la colaboración entre ambos como clave para actuar con rapidez.

Un visionado del partido sirve para extremar las medidas en el caso de dos jugadores celestes, los que más cerca estuvieron del contagiado. Sin embargo, se constata que, por la propia velocidad del partido y los constantes cambios defensivos, ese contacto es bastante inconstante. También se sospecha de que en ese momento podría tener poca carga vírica, de los contrario habría más casos.

No hay comunicación oficial, pero el Río Breogán decide actúar como si lo hubiera y suspende los actos del martes con patrocinadores. Eso sí, cambia el confinamiento por autoconfinamiento, sobre todo para permitir que los extranjeros ya con el billete comprado pudieran viajar con la PCR negativa. Los que se marcharon harán la segunda PCR en sus países y los nacionales, aquí. Entre tanto todos se comprometieron a limitar al máximo sus contactos. "Hacemos seguimiento continuo, todos dieron negativo y están sin síntomas", confirmó Luis Coira.

Comentarios