De la carestía al empacho. Así ha pasado el Lugo en apenas quince días. La recuperación de lesionados junto con el trabajo del director deportivo del Lugo, Víctor Moreno, ha convertido el páramo en el que las bajas habían convertido el vestuario rojiblanco en un "overbooking" que Francisco Rodríguez tendrá que gestionar en las próximas semanas.
Mientras en Almería y en Reus el preparador andaluz tuvo que recurrir a tres futbolistas del filial de la Autonómica Preferente Norte debido a la plaga de ausencias por lesiones y ventas, este sábado (20.30 horas, GolTV) frente al Cádiz contará con todas sus fichas disponibles a excepción de los lesionados de larga duración: Francisco Fydriszewski y Eduard Campabadal.
Ante el Almería, Francisco tuvo que convocar a Cacharrón, Escriche y Pedro López, mientras que ante el conjunto catalán repitieron Cacharrón y Escriche, a los que se unió Manuel Núñez.
Junto a estos cuatro futbolistas del Polvorín, Francisco tuvo que recurrir también a Luis Díaz en 4 partidos -Barcelona B, Tenerife, Granada y Córdoba- y en la Copa del Rey ante el Nástic en Tarragona, donde jugó 35 minutos.
No obstante, en cuestión de apenas dos semanas, la enfermería del Lugo se ha quedado vacía salvo los lesionados de larga duración: Francisco Fydriszewski y Eduard Campabadal.
Sergio Gil y Campillo ya formaron parte de la convocatoria para medirse al Spórting, mientras que otros futbolistas como Luis Ruiz evoluciona favorablemente de su sinovitis y distensión ligamentosa de tobillo. El lateral izquierdo ya entrena con el grupo y podría estar a disposición de Francisco.
Otro de los futbolistas dudosos, el extremo diestro Iriome González, que se resintió de sus problemas en el tobillo derecho tras el duelo del pasado domingo, también trabajó con normalidad y apunta a estar disponible para el Ramón de Carranza.
Incluso Adriá Carmona, que lleva más de un año de baja por una lesión de rodilla y una rotura de fibras, también trabaja con el resto de sus compañeros pero con tiempo e intensidad limitadas.
A la recuperación de los jugadores dañados hay que unir las incorporaciones de Álvaro Lemos para el lateral diestros, de Jaime Romero -que ayer no trabajó por una gastrointeritis leve- para el extremo y de Chuli para la delantera. El punta también entrena con normalidad y solo falta que disponga del alta médica para jugar con el equipo.
«Es bueno para el equipo que estemos todos recuperándonos, que estemos as disposición del míster y que él pueda elegir. Sobre todo, para competir. Para que, tanto el que esté jugando como el que no, sepa que hay gente que estamos para poder entrar y que no se puedan relajar. Eso es bueno», declaró el centrocampista Antonio Campillo.
