No es la primera vez en las últimas temporadas que el Club Deportivo Lugo disfruta de una racha de cinco partidos, o más, sin conocer la derrota. La llegada de Mehdi Nafti ha cambiado la dinámica perdedora con la se que arrancó la temporada, y desde toma las decisiones el equipo suma cuatro triunfos y un solo empate. Un total de 13 puntos de 15 posibles que han empujado al club de la zona baja a la zona noble. De hecho, una derrota ante el líder, el Espanyol, este sábado (21.00 horas) no empañaría el gran momento del Lugo, como se ha demostrado en otros cursos.
La primera gran racha en Segunda División se protagonizó con Quique Setién a los mandos. El cántabro arrancó los diez primeros encuentros de la temporada 2014-2015 con tres triunfos, cinco empates y dos derrotas. Seis jornadas consecutivas sin perder en una gran primera vuelta que, para colmo, se repitió en la segunda ante los mismos equipos. En ese caso, de esos diez encuentros, el Lugo de Setién ganó cinco, empató tres y perdió solo dos.
Con Luis César, por ejemplo, el club sumó nueve jornadas sin perder
El siguiente lapso ganador se dio con Luis Milla antes de que abandonara el banquillo rojiblanco por problemas personales en la 2015-2016. Con el turolense, el Lugo encadenó ocho partidos seguidos sin perder entre las jornadas 9 y 19, con un balance de cuatro victorias, cinco empates y dos derrotas.
La mejor de las rachas la protagonizó Luis César Sampedro en la temporada 2016-2017 con nueve partidos consecutivos sin conocer la derrota. Su Lugo ganó cinco partidos, empató cuatro y perdió uno, el último, entre la primera jornada y la décima.
Su buen trabajo lo continuó Francisco Rodríguez, que a pesar de dos derrotas en diez partidos –entre las jornadas 9 y 19–, logró sumar siete victorias –cuatro consecutivas– y un empate. En total, 22 puntos de 30 posibles que convirtieron al equipo lucense en la revelación de la primera vuelta de la temporada 2017-2018.
El siguiente fue Eloy Jiménez, que entre su llegada a final de la temporada 2018-2019 y el principio de la 2019-2020 encadenó ocho encuentros sin perder –dos victorias, seis empates y una sola derrota–.
El último gran periodo lo firmó Juanfran García al final del curso pasado, cuando salvó al Lugo a falta de seis jornadas con cuatro triunfos y tan solo dos empates.