El Millenium Stadium de Cardiff albergará el próximo 3 de febrero el partido inaugural del VI Naciones. Gales contra Escocia. Más de 72.000 almas animando a los ‘dragones’, celebrando cada melé, acabando las existencias de cualquier Subway a diez kilómetros a la redonda y esperando que Alun Wyn Jones grite de alegría al finalizar el encuentro. Y Jones deseando pegar ese grito. Un grito que reuniría horas y horas de entrenamiento, risas, llantos, dedicación, esfuerzo y, sobre todo, recompensa.
Es muy complicado ser el capitán de la selección de Gales. Llegar a ser internacional, o simplemente profesional de cualquier deporte. Pero todos y cada uno de ellos comenzaron en un campo como As Pedreiras. Calzándose las botas y soñando con ser Lomu, Chabal, Pichot o Wilkinson. Con o sin pretensiones de llegar a lo más alto, pero siempre con la idea de pasárselo bien practicando el deporte, dicen, más noble de la tierra.
En eso anda el Muralla. No diseñando al próximo Jaime Nava —o sí—, sino intentando acercar a los más jóvenes un deporte que, a pesar de su tradición en Lugo, suena demasiado lejano para muchos lucenses.
"Tenemos el hándicap del concepto que tiene la gente, que lo ve como un deporte violento, bruto. Pero después, cuando se acercan, ven que no tiene nada que ver. Los que prueban se quedan encantados. Nuestra mejor propaganda es que vengan, que vean cómo se lo pasan los chavales, el ambiente. Nosotros trabajamos mucho en la inculcación de valores, el trabajo en equipo, el respeto. Eso influye mucho", cuenta Alberto García, responsable de las escuelas del equipo lucense.
El Muralla cuenta actualmente con unos 60 niños de las categorías sub 6, sub 8, sub 10 y sub 12 —las escuelas—, más el equipo sub 14: "Hasta los sub 12 no hay competición propiamente dicha. Se hace una juntanza organizada por la Federación, cada mes en una ciudad distinta, donde nos juntamos las escuelas de toda Galicia y jugamos partidos. En los sub 14 ya hay una liga regular, este año es la primera vez que compite nuestro equipo y tenemos el reto de sacar un sub 16 el año que viene", narra García.
"Es complicado porque el fútbol le tira a la mayoría de los niños, en Lugo también el baloncesto. El rugby es muy minoritario. Uno de nuestros objetivos es normalizarlo dentro de la población", asegura el coordinador.
El técnico del Muralla recuerda, además, que "cualquier persona es válida" para practicar el deporte del óvalo: "cualquier condición física, complexión, altos, bajos, gordos, delgados... todo el mundo tiene un puesto en el que puede jugar. Solo le digo a la gente que se anime y pruebe", añade.
El rugby busca apoyo en la gente y As Pedreiras tiene las puertas abiertas. "Solo prueben y verán como pronto se enganchan".
El rugby en Galicia
El coordinador de la escuela del Muralla asegura que el rugby en Lugo está «al nivel» de cualquier ciudad gallega: "Hoy en día, a nivel de escuela, estamos al nivel de cualquier otro club. Tanto en número de niños como en nivel. Lugo es una ciudad con tradición de rugby. En los 90, cuando el Xabarín estuvo en Primera División, había una tradición que después se vino un poco abajo, pero que estamos intentando recuperar", afirma García.
Contacto
Los interesados en ponerse en contacto con el club o solicitar más información pueden acudir a As Pedreiras o enviar un correo electrónico a la dirección escola@ murallarugby.com
