Pese a lo abultado del resultado, al Vilalbés le costó entrar en el partido, ante un Ribadumia que se plantó mejor sobre el terreno de juego y que metió varios sustos en los primeros minutos como una contra de Teti que no llega a definir pese a encontrarse solo o en su posterior saque de esquina en el que, en medio del barullo en el área, el balón pegó en el poste (m.8).
Los locales tardaron 20 minutos en tirar a la portería del Ribadumia, y fue con una falta directa de Rubén Gómez que se marchó por poco. Tres minutos más tarde, Javi Varela abría el marcador al definir bien en el área tras recibir un pase de su hermano José desde la derecha. El gol permitió al Vilalbés asentarse en el terreno de juego y empezar a desplegar su juego, cortando las ocasiones del rival.
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