Tras militar las últimas cinco temporadas en el Arenal Emevé, equipo al que estuvo vinculado desde muy temprana edad, Mario Dovale, de 24 años, decidió probar esta campaña suerte en el extranjero. Fichó por el subcampeón de la liga rumana, el Dínamo de Bucarest.
El líbero lucense, que es un fijo en la selección española de voleibol, disputaba este martes su primera final con su nuevo equipo, la de la Supercopa, en la que se imponía por 3-2 al vigente campeón rumano, el CS Arcada Galasti. El partido fue igualadísimo, pues los sets se resolvieron por 25-23, 23-25, 27-25, 26-28 y 17-15.
El equipo de Mario Dovale se había deshecho en las semifinales del CS Steaua de Bucarest por un cómodo 3-0.