Xoel García Neira: "Llegué en muy buen momento, pero el triunfo fue una sorpresa"

El palista focense se impuso en una prueba de fondo a pesar de ser especilaista en distancias cortas. El joven deportista se entrena desde octubre en Asturias con la selección española juvenil, un cambio duro pero necesario para desarrollar un potencial con el techo muy alto

Xoel García Neira. AMA
photo_camera Xoel García Neira. AMA

Xoel García Neira asusta. Su carné lo califica como un deportista sub 17, y como tal se acaba de proclamar campeón de España de la categoría en el k-1 5.000 —y subcampeón júnior— a pesar de que es un hombre de distancias cortas. Lo que asusta es que, precisamente en las distancias cortas, no se comporta como un sub 17. Parece un veterano que lleva dé- cadas explicando su trabajo sobre la piragua. Quizás ésa sea una de las causas por las que este palista patrocinado por Construcciones Saa venciese en Sevilla.

Campeón de España, reportajes, sesiones fotográficas, una recepción en el Concello de Foz... ¡Menudos días lleva!
Todavía me dan bastante vergüenza estas cosas. Pero se lleva bien.

Por su trayectoria, parece que va a tener que perder esa vergüenza. Tiene pinta de seguir ganando.
Lo importante viene ahora. Comienza la temporada en pista, que es lo que a mí se me da bien. Los 200, que son mi especialidad, el selectivo para el Mundial y el campeonato de Europa... Es el mejor momento.

¿Fue sorprendente para un chico de distancias cortas ser campeón en 5.000 metros?
Totalmente. El 200 y el 500 son mi especialidad y en el 1.000, que se me escapa un poco, me defiendo bastante bien. Pero las distancias largas nunca se me dieron bien. Me sorprendió mucho. Es cierto que había entrenado duro, pero no contaba con ese resultado.

¿Preparó específicamente la distancia larga? ¿O formaba parte de la preparación para la pista?
Desde finales de septiembre estuvimos preparando este campeonato de Sevilla. Sí me entrené de cara a la distancia larga, a pesar de que no me gusta demasiado. Fue duro pero llegamos a la competición en un momento muy bueno; no solo yo, todo el equipo. Y por eso llegaron los resultados.

¿Qué tal con su nuevo equipo? ¿Cómo están siendo los entrenamientos en Trasona?
Fue un salto grande. Me adapté bastante bien a los entrenamientos y a los compañeros. Fue duro el cambio, pero estamos bien.

¿Cómo surgió la posibilidad de entrenar con la selección nacional juvenil?
Me llegó la propuesta para entreXoel García Neira, con su patrocinador. nar en Trasona y sabía que era el mejor sitio para continuar progresando. Está el grupo más fuerte y el mejor enternador de juveniles, Ángel López. El cambio era complicado, pero creo que fue una decisión acertada.

No era la primera vez que daba un cambio en su vida para mejorar. Estuve dos años en el Centro Gallego de Tecnificación Deportiva, en Pontevedra. Me fui de casa a los 14 años. Otra decisión dura en su momento, pero sentía las ganas de probar, de saber cómo era esa vida. Progresé mucho, fue una buena decisión. Como la de dejar Pontevedra para ir a Trasona.

¿Cuándo se dio cuenta de que podía hacer algo importante en el deporte?
El momento clave fue cuando gané el gallego en Narón, en el 2013. Fui campeón alevín y creo que entonces empecé a tomarme más en serio el piragüismo, a entrenar más. Empecé a ver más factible poder entrenar en un lugar como el centro de tecnificación.

¿Qué fue más duro, irse de casa a los 14 años o marchar ahora a Asturias?
Irse de casa a los 14 es muy duro. Pero afortunadamente me adapté rápido. Y el cambio de ahora tampoco me costó demasiado, ya llevaba dos años fuera de casa, y aunque no es lo mismo, te adaptas rápido.

¿Hay pique en Trasona?
Todos queremos ganar y no se puede. Pero el roce hace el cariño y la convivencia es buena. Si hay algún piquecillo, es sano y con buen rollo.

"He ido poco a poco y mis sueños se cumplieron. Tendré tiempo para pensar más allá"
¿Qué objetivos tiene para la temporada en pista?
En dos semanas vamos a la Copa de España de 1.000. Y los días 5, 6 y 7 de mayo son los selectivos de Trasona. Ahí se deciden las plazas para el Mundial y el Europeo. Son las regatas más importantes.

Todavía eres muy joven y tienes muchos objetivos a corto plazo, pero, ¿hay tiempo para soñar?
Hasta ahora siempre fui poco a poco y los sueños se fueron cumpliendo. Entrar en el centro de Pontevedra fue un sueño; representar a mi país fue otro y lo conseguí en las Olimpiadas Juveniles. Con esfuerzo y trabajo, todo se consigue. Tengo mucho tiempo para pensar en algo más grande.

¿Juegos Olímpicos?
Eso es lo más grande, pero mi vista no está puesta ahí. Para imaginar y tomar el día a día con más ganas, puede ser.

Tienes un aplomo impropio de alguien a los 17. ¿Ayuda en la pista?
Soy calmado, los nervios no me traicionan y siempre pude competir bien por eso. Ese factor quizás me ayudó en la pista y fuera.

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