El Rácing Vilalbés ha premiado el buen trabajo desarrollado por Simón Lamas en las dos últimas temporadas y este lunes comunicó de manera oficial que tanto él como su cuerpo técnico al completo continuarán al menos un año más en Tercera División. El chairego, un hombre de club, ve cumplido un nuevo sueño a sus 28 años y tendrá la oportunidad de sacarse una doble espina clavada, ya que tomó las riendas del equipo con la temporada pasada, la 2018-2019, ya iniciada y no pudo terminar la actual por la crisis del coronavirus. "A ver se á terceira va a vencida", ironiza.
A pesar de todas las circunstancias y un parón que dejó todo en el aire, Lamas explica que en "ningún momento" se planteó un cambio de aires. El hecho de no poder finalizar la temporada, y de, a su parecer, merecer una mejor posición en la clasificación, motivaron al joven entrenador a apostar por el club de su vida. "Desde que comezou a situación o presidente me fixo saber que confiaba en nós. Pola nosa parte igual, coa única condición de que continuara todo o corpo técnico e así foi", dijo.
Lamas reconoce que ante la gravedad de la situación, "o fútbol pasou claramente a un segundo plano", pero que con el regreso paulatino de la normalidad, "os que estamos metidos neste deporte podemos pensar un pouco máis xa no futuro". El entrenador desea que todo esté "controlado" para volver a disfrutar de un deporte que, según él, hace falta "para que a xente se olvide un pouco do que estamos pasando".
El chairego, que ha sido ya futbolista, coordinador de cantera y ahora entrenador del primer equipo, celebra que la directiva del club recompense el buen trabajo realizado en las dos últimas campañas con una renovación y apunta que el proyecto se encamina a mantener el actual bloque de jugadores.
"A idea é darlle continuidade á meirande parte da plantilla e ao traballo que estabamos a facer", indica. ¿Los objetivos? "Demostrar nun ciclo completo o traballo que somos capaces de facer", concluye.
Segunda temporada
En relación con el curso ya finalizado, Simón Lamas se queda con el trabajo diario y el ambiente positivo. "Os xogadores traballaron moi ben pero quedou ese sabor amargo", dice. También destaca el debut de varios jugadores, algo que "como vilalbés me enche de ledicia".
