El sueño tendrá que esperar

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A muy pocos centímetros se quedó el Burela FSF Pescados Rubén de alcanzar la final de la Copa de España que se disputa en la localidad mariñana. Las naranjas sucumbieron ante un muy buen equipo, el Móstoles, que tuvo que sudar mucho para conseguir una victoria muy trabajada (1-2). Las madrileñas se enfrentarán este domingo al Rioja Diamante, que dio la sorpresa al vencer (1-0) a quien todos daban por favorito, el Ponte Ourense.

Las de Pardeiro salieron en tromba nada más iniciarse el encuentro. Ese plus de motivación sirvió para que Vanessa rematase al fondo de la portería un buen centro de Claudia cuando solo transcurrían tres minutos de juego. La grada era una fiesta al ver como su equipo se ponía por delante en la eliminatoria frente a un rival al que le cuesta ir a remolque pese a su potencial. El Burela estaba en un buen momento y sus jugadoras intentaban lograr la mayor renta posible, conscientes de que tarde o temprano el Móstoles despertaría. Durante los cinco primeros minutos a las azules ni se las veía sobre la pista, ya que estaban todo el tiempo persiguiendo el balón sin poder alcanzarlo.

Empezó a entrar en escena el Móstoles a partir del minuto 8. El Móstoles subió la línea de presión buscando el robo con lanzamiento, pero curiosamente cuando mejor estaban las madrileñas las locales volvieron a coger las riendas del partido gracias a su intensidad.

Las opciones de ataque del Burela pasaban por Vanessa. La brasileña, muy marcada en los primeros minutos, se encontró con más espacios según avanzaba el encuentro

El segundo tiempo fue muy diferente al primero y la clave del partido estuvo en esos primeros minutos de periodo. El Móstoles salió mucho más centrado a la pista, mientras el Burela, muy metido atrás, no se encontraba cómodo. Las madrileñas imprimieron al choque una marcha más y las mariñanas no pudieron seguirles el ritmo. De esta forma, en cinco minutos de acoso azul llegaron los dos goles del Mostoles, ambos en el minuto 25. El primero tras un disparo ajustado de Patri Jornet al palo corto que sorprendió a Jozi y el segundo en una jugada de combinación en la que Bea Martín se quedó sola por el centro y batió a la guardameta brasileña en su salida.

Eran momentos de desconcierto los que vivía el Burela, que antes de la avalancha pudo haber situado el 2-0 en un centro de Dolo que llegó a Claudia, quien se encontro con una inspirada Sonia.

Tras los dos goles el Burela tardó en reaccionar, aunque logró solventar con acierto los intentos del Móstoles por firmar el tercero. Las cosas se complicaban para las mariñanas al alcanzar la cuarta falta cuando restaban 10 minutos de partido, pero tiraron de casta. Dolo actuó de portera jugadora los últimos cinco minutos, en los que el Móstoles se limitó a defender. En ese tiempo la suerte no estuvo del lado de las naranjas, a quienes entre su falta de acierto y la excelente actuación de Sonia se quedaron sin un empate que sin duda merecían, aunque también es cierto que el Móstoles tuvo una mayor eficacia que le permitió ganar el encuentro.

+ INFO este domingo en la edición impresa de A Mariña El Progreso

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