El comienzo de la Liga de fútbol 2014-2015 en Segunda División se ha convertido en todo un lío para el único representante gallego, el CD Lugo, que a once días de que eche a rodar el balón todavía no sabe dónde lo hará. La decisión de un juez, pese al rechazo de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), deja en el aire el lugar dónde disputarán los lucenses su primer partido.
El sorteo del calendario deparó un Murcia-Lugo para el 24 de agosto, pero los problemas fiscales del cuadro murcianista llevaron a su descenso administrativo a Segunda B, con lo que su lugar lo ocuparía el Mirandés, que el año pasado descendió de Segunda (en Lugo, precisamente).
Pero el juzgado de lo mercantil número siete de Madrid admitió a trámite un recurso del Murcia y adoptó, como "medida cautelarísima", la decisión de suspender el descenso. La LFP aseguró este miércoles que ahora es imposible rectificar, aparte de que no ha recibido comunicación oficial.
En Lugo siguen el conflicto con interés, pero sin tirarse de los pelos. Este miércoles, el portero Jon Ander aseguró que jugarán donde lo decida la Liga. "A todos nos gustaría que ya estuviese aclarado cuanto antes, pero, ahora, a esperar lo que diga la Liga y nosotros, donde nos digan, iremos a jugar", señaló en rueda de prensa.
El guardameta vasco, una de las incorporaciones del Lugo esta temporada, pronosticó que "hasta el último día no va a estar claro" dónde comenzará la temporada el equipo gallego.
