El Breogán visita Marín sin posibilidad de fallar

Toda una final. Aunque generalmente los protagonistas prefieren restar trascendencia a los partidos, en el caso del que este sábado (20.00 horas, Pabellón de A Raña) disputarán el Marín Peixegalego y el Cafés Candelas Breogán no es posible hacerlo. Y es que aunque con objetivos opuestos el triunfo es irrenunciable para los dos conjuntos gallegos. Para los locales, porque una derrota podría implicar su virtual descenso, ya que si este domingo el Clavijo derrota al Peñas Huesca, los de Marín tendrían que ganar los cuatro partidos que restan y que los perdieran los de Logroño para seguir en la LEB. Se lo juegan todo.

La situación del Cafés Candelas Breogán no es tan dramática, porque aún en el caso de fallar este sábado, no se cerrarían todas las posibilidades de ascenso. Posibilidades que crecieron un poco tras la derrota del Burgos este viernes en la pista del Ourense, y que pudieron aumentar mucho, pues el Gipuzkoa ganó (83-81) a un Castelló que falló un triple a dos segundos del final.

Por lo tanto, no habrá concesiones. El conjunto local, que ha perdido sus últimos tres encuentros en A Raña frente a Ourense (78-86), Burgos (79-89) y Palencia (74-84), habrá reforzado su moral tras su inesperada victoria de la pasada semana en Lleida (73-79). Pero ese arreón anímico puede tener un efecto efímero si el Breogán es capaz de imponer su superioridad desde el inicio. Toda la motivación y fuerza con la que, a buen seguro, saldrán a jugar los de Javi Llorente se podría diluir con cierta facilidad, porque en la complicación podrían resurgir más pronto que tarde las dudas lógicas de una plantilla acostumbrada a perder, tras acumular 22 derrotas en las 29 jornadas disputadas.

Por lo tanto, una de las claves del encuentro estará en que los de Lezkano igualen al menos de salida la motivación de los locales. Que el Breogán sea capaz de imponer su superioridad desde el inicio. Quizá el susto sufrido el pasado martes ante el Clavijo en el Pazo haya servido de lección a los breoganistas. Ya no hay partido fácil cuando hay tanto en juego.

El Marín está pagando la novatada en su estreno en la categoría. Muchos cambios en una plantilla justa que, probablemente, con algo más de estabilidad podría haber conseguido mejores resultados. Una de las debilidades del equipo pontevedrés está en su juego interior. Aunque los teóricos titulares: Jason Cain y Javier Múgica, son jugadores contrastados en esta competición, la escasa rotación en esa posición les hace ser más débiles que muchos de sus rivales. Probablemente este aspecto sea en el que el Breogán intente empezar a minar a su rival.

Y es que en el perímetro, aunque resentido tras la marcha de José Simeón al Lleida, el Marín tiene jugadores de calidad. Es el caso de Andres Miso, de los estadounidense Gabe Rogers o Tim Derksen -tercer máximo anotador de la Liga- o el exbreoganista Javier Romero.

Se da la circunstancia de que, con respecto al partido de la primera vuelta, y que finalizó con triunfo breoganista (88-66), se ha producido un intercambio de jugadores entre el Marín y el Breogán. Jorge Romero pertenecía en aquel momento a la disciplina breoganista, aunque por decisión técnica no llegó a jugar aquel encuentro, mientras que Mario Cabanas es ahora jugador del conjunto lucense. En el partido de la primera vuelta, el pívot coruñés anotó seis puntos (3/3 en tiros de dos puntos) y capturó tres rebotes.

Natxo Lezkano podrá disponer de todos los jugadores en el encuentro de esta tarde. Josep Franch, que no jugó el pasado martes ante el Clavijo y desde el jueves entrenó con precauciones, está recuperado de la sobrecarga, aunque es posible que su participación en el juego se vea limitada para evitar una posible recaída en su lesión.