Que Vilalba tiene una gran cantera de luchadores no se les escapa a nadie. Los hermanos Castro, Nicolás e Iván, o José Cuba, 13 veces campeón de España, dan buena muestra de ello, pero es cierto que las generaciones que vienen detrás también están mostrando un gran potencial. Con el objetivo de que éste no se quede por el camino y poder sacarle el máximo rendimiento, el Club de Loita Vilalba cuenta con un ayudante de excepción: nada más y nada menos que un campeón del mundo y medallista olímpico.
Quizás los apellidos de los veteranos luchadores vilalbeses hacían prever la relación de amistad que se forjó entre ellos y Alexis Rodríguez, deportista cubano de la época dorada de la lucha libre olímpica en su país, en el campeonato del mundo júnior de hace ya más de dos décadas. Con el título mundial del año 1998 y un bronce en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000 y un quinto puesto en Atenas 2004, es «toda una personalidad en el mundo de la lucha, con un estilo reconocido», tal y como apunta con admiración Iván Castro, responsable del club vilalbés.
Rodríguez entrena por voluntad propia en Vilalba, donde se siente "en casa"
Tras su retirada en el 2008, fue fichado para reforzar el cuerpo técnico de países punteros en este deporte como Azerbaiyán, en el que ayudó a conseguir importantes resultados, incluida una medalla de bronce en pesos pesados en los últimos Juegos de Río.
Pese a tanto bagaje sobre sus espaldas, Alexis reconoce estar «como en casa» entre los luchadores chairegos, con los que ya entabló relación en verano a través de un 'sparring' promovido por el club vilalbés. Ahora, el cubano sigue entrenando en Vilalba por voluntad propia, de martes a viernes. "Aquí se trabaja muy bien y estoy con mi gente", reconoce.
"Nuestra intención es mantenerlo con nosotros hasta los Juegos de Tokio, pero tiene otras ofertas muy importantes con las que ahora mismo no podemos competir. Sabemos que pudiendo igualar las deportivas, él se quedaría de muy buena gana y entonces incluso la federación gallega querría que trabajase como seleccionador. Pero estamos a la expectativa", comenta Iván Castro.
Rodríguez también se une a explicar un proyecto a largo plazo para el que pide una mayor colaboración e implicación. "Tenemos a José Cuba, con condiciones para luchar a alto nivel. Si se trabaja con él, quién sabe a lo que se puede llegar", apunta sobre la posibilidad de clasificar para Tokio 2020. Un sueño olímpico del que el vilalbés se quedó a las puertas en dos ocasiones.
"Aquí se trabaja mucho con la base y hay potencial con el que trabajar, pero hace falta algo más. Si no recibe el apoyo necesario, si no se le presta la atención debida, es como una flor que si no la riegas no sale. Yo quisiera estar aquí y verlos llegar lejos", dice Alexis.
El club vilalbés está a la espera de si recibe apoyo económico para poder fichar al cubano
IDEAS. Elaborar un plan que pudiera permitir entrenar a un mayor nivel, hacer concentraciones, competiciones internas y torneos nacionales e internacionales es la propuesta del luchador cubano para sacar el máximo rendimiento de los deportistas vilalbeses.
Su entrenador por su parte considera buena idea que el club fuera "un centro de apoyo a la tecnificación", lo cual daría más facilidades a nivel técnico, de formación y de financiación. "Teníamos el compromiso del anterior concejal de Deportes para hacer algo importante y la Diputación se comprometió para darnos una ayuda hasta el 2020 para tener a Alexis aquí. Pero de momento es todo incertidumbre", asegura Castro.
Explica también que actualmente "lo que nos mata es la continuidad". "Tenemos muy buenos luchadores júnior y cadete, pero que cortan su trayectoria por los estudios y porque no hay una infraestructura oficial que los pueda ayudar y es lo que las administraciones no ven. Queremos darles un plus, una calidad extra y Alexis es eso", insiste, al tiempo que recuerda que este "no es un proyecto solo para Cuba, lo es también para Ramón (Monasterio), Carlos (Yobanni) y varios más para los Juegos de Tokio".
"Proyecto tenemos, las intenciones son las mejores del mundo, pero estamos a la expectativa", añade Alexis.
Mientras, disfrutan de su destreza, sus conocimientos y sus consejos. "Su llegada se notó mucho, a todos los niveles, porque es un tío muy alegre. Hay gente de fuera que quiere venir a entrenar con él y tiene proyectos para ir a Cantabria, Asturias... ¡Nos lo quitan de las manos!", sentencia Castro.
