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Decisivos en el centro del campo en el derbi

La movilidad de Acorán y su intuición para explotar el juego sin balón de Yuri es uno de los grandes peligros del fútbol de la Ponferradina ►La inteligencia de Pereira junto a la velocidad y habilidad de Ferreiro e Iriome pueden ser importantes para el Lugo en el derbi de Os Ancares
Fereiro corre junto a Andy en un Ponferradina-Lugo de Copa.
photo_camera Fereiro corre junto a Andy en un Ponferradina-Lugo de Copa.

Centrocampistas en el reino de Yuri y Caballero para hacerse valer como ‘primus inter pares’ y desterrar cualquier atisbo de monarquía absoluta en lo ofensivo. Los costados impulsan el juego del Lugo y la Ponferradina para que los puntas brillen de cara a la portería contraria. La libertad de movimientos de Pereira, Ferreiro y Acorán, junto al trabajo y la pegada de Álvaro Antón y la verticalidad de Iriome son puntos fuertes de dos equipos, que se jugarán el triunfo el sábado (18.00 horas) en el Ángel Carro.

La medular del Lugo tendrá que tener cuidado con el fútbol desplegado por Acorán. El jugador canario de la Ponferradina comanda la ofensiva berciana con inteligencia e intuición para observar y aprovechar los espacios generados a la espalda de los mediocentros rivales. El futbolista chicharrero se coordina a la perfección con Yuri para llegar a zonas de peligro y ser decisivo.

A pesar de que Acorán parte desde el extremo derecho blanquiazul, cuenta con la libertad suficiente como para aparecer por dentro, generar peligro entre líneas y dar el pase decisivo o disparar a puerta. El de Santa Cruz mostró todas sus virtudes el pasado domingo ante el Osasuna. Llevó adelante el contragolpe del primer tanto tras combinar con Adán para marcar su primer tanto en la Liga, así como una diagonal suya acabó en el pase a Berrocal que generó la falta del segundo gol.

La zaga del Lugo y las ayudas del mediocentro tendrán que prestar especial atención a los arrastres sin balón de Yuri y a las llegadas de Acorán cerca del área.

Un trabajo similar lleva a cabo Jonathan Pereira en la izquierda del ataque rojiblanco. El vigués también surge desde la banda para ocupar un lugar en el medio, por detrás de un Caballero que suele crear huecos para que el exjugador del Villarreal pueda desequilibrar con un pase, un regate o un disparo a puerta.

Otros dos jugadores a los que prestar atención en la Ponferradina son Berrocal y Álvaro Antón. El extremo izquierdo es temible a balón parado y su trabajo permite que el centro del campo sufra menos de lo debido. Las ayudas constantes a Melero y Jonathan Ruiz impiden que el contrario supere a su centro del campo, así como su repliegue en la banda ayuda a Casado a que no se creen superioridades en el costado.

Berrocal es fundamental para el juego en largo berciano, al que el equipo no duda en recurrir en caso de que la presión rival obligue. Bien adaptado a la movilidad de Yuri arriba, destaca por sus prolongaciones hacia los desmarques de ruptura del brasileño, como sucedió el domingo pasado. Además, es digna de destacar su colocación sin balón para cooperar en la presión y evitar que el rival saque el balón limpio desde atrás.

IRIOME, JUGADOR DISTINTO. El factor diferencial en las ofensivas de Lugo y Ponferradina puede ser Iriome. El jugador de Icod de los Vinos es un extremo puro, con tendencia al desborde por fuera, a ganar la línea de fondo y centrar o llegar para finalizar la jugada.

Pero el fútbol de Iriome no se limita a recibir y explotar su velocidad y habilidad por la derecha. Su trabajo en defensa permite a Pau Cendrós no verse superado en las subidas de los jugadores de banda rivales.

David Ferreiro es otro futbolista diferente, capaz de imprimir electricidad al juego, de regatear en una baldosa y disparar tras una diagonal desde la izquierda. Su rapidez también le permite superar al lateral y su precisión en los centros evidenciar que las bandas pueden ser el eje de la ofensiva en el llamado derbi dos Ancares.

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