De nuevo rumbo hacia Libia

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El extécnico y exdirector deportivo del Azkar Lugo Pablo Prieto se encuentra estos días en Egipto, donde ha coincidido con los integrantes de la selección libia, a los que dirigió hasta que estalló la revuelta que acabó con el régimen del dictador Muamar el Gadafi. Los que fueron sus jugadores, que podrían volver a serlo en breve, estáran concentrados en El Cairo hasta el domingo, como paso previo a unos amistosos ante Túnez los días 22 y 24.

El entrenador ferrolano está pendiente de concretar definitivamente su reincorporación a la selección libia, para lo que será decisiva la reunión que mantendrá en loa próximas horas con los nuevos responsables de la federación. «Los nuevos dirigentes del fútbol sala en Libia se pusieron en contacto conmigo después de la muerte de Gadafi. Después de conseguir el visado en la embajada de Libia en Madrid me comunicaron que me incorporase a la concentración en Egipto con el objetivo de reunirme con el nuevo presidente y así poder hablar de la situación contractual que tengo con la federación y el futuro de la selección», explica.

En el aspecto logístico, Pablo Prieto comentó ayer las últimas novedades que conoce acerca del regreso de la selección a las competiciones internacionales. «La federación está pendiente de conocer a través de la confederación africana de fútbol las fechas de la Copa Norte de África y la Copa África, torneo clasificatorio para el Mundial de Tailandia que se celebrará en noviembre del año 2012. Todo funciona con normalidad en la concentración», concluye.

Consciente de las dificultades de la apertura en Libia tras el conflicto armado, Pablo Prieto explica que sus jugadores le comentaron en el aeropuerto que tuvieron algún que otro problema en el traslado. «Me comentaron que en el viaje por carretera entre Trípoli y Túnez tuvieron algún problema por unos incidentes que se estaban produciendo en la zona de Al Zawiya entre alguna tribu afín a Gadafi y los rebeldes. Decidieron cambiar el itinerario y llegaron a Yerba (Túnez ) sin ningún tipo de problema», explica.

Pablo Prieto, que tiene contrato en vigor con la selección libia hasta el 31 de diciembre de este año, quiere ver la situación actual en la federación y en el país norteafricano antes de decidir su futuro. «Ahora mismo, lo más importante es la reunión que vamos a tener, dado que hay muchos temas importantes que tienen que estar aclarados por ambas partes. Hasta que no acabara la guerra no tenía sentido hablar de mi contrato», manifiesta.

El entrenador ferrolano tiene claro que todo pasa por esa reunión antes de confirmar su regreso a una selección en la que triunfó hasta que estalló el conflicto armado en Libia. «Hay que analizar la situación actual tanto por parte de la federación como por mi parte y, por supuesto, ver la dinámica de la selección es estar de nuevo en la dinámica de todas las competiciones internacionales», termina.

SENTIMIENTOS
«Me emocioné al verlos de nuevo»

Después de meses de incertidumbre y una salida de Libia no exenta de peligro, Pablo Prieto vivió en el aeropuerto en El Cairo un momento de emoción increíble al volver a los que fueron sus jugadores. «No pude evitar emocionarme. Dejé a mis jugadores después de una concentración en Italia, y a partir de ahí el país estuvo en guerra civil. Un jugador ha perdido a un hermano y me han contado historias que ponen los pelos de punta. Pero sí digo que si no hubiese conocido todo lo que pasó no habría percibido ningún síntoma de que hayan vivido una guerra durante casi ocho meses», señala.

En el recuerdo

No obstante, Pablo Prieto nunca perdió del todo el contacto con los jugadores desde que salió de Libia en un avión con trabajadores de la compañía Repsol. «A través del skype hablaba casi a diario con mi traductor, Issa Ibrahim, y con muchos jugadores», dice.

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