David Maira, un novato en el podio

A David Maira no lo conocía absolutamente nadie. Era el novato del campeonato gallego de full contact, su primera competición. Nadie le conocía y tampoco nadie se esperaba que 'el nuevo' llegara tan lejos pero lo hizo. El factor sorpresa contó, pero también el talento del luchador lucense, que combina el ring con los exámenes de ingeniería agrónoma.

David Maira se deshizo de todos sus rivales en la categoría de -63 kilos hasta llegar a la final del torneo, pero allí los nervios del principiante también subieron al ring. La falta de experiencia hizo mella en el luchador lucense, que acabó cayendo y proclamándose subcampeón gallego contra pronóstico. Fue el premio a un duro trabajo que inició hace tres años cuando decidió comprarse un saco de boxeo. Pegar golpes sin ton ni son no era lo suyo. Tras varios meses Maira decidió plantarse en el gimnasio en busca de David Alonso, campeón gallego y luchador con gran exepriencia en la disciplina de full contact—una mezcla entre boxeo y kárate—.

"Quería aprender más. Conocer una técnica no sólo dar golpes" recuerda Maira. David Alonso no tardó en ver el potencial que escondía ese chaval rubio, con ojos azules y pinta de no haber roto un plato en su vida y decidió entrenarle. El gran resultado del joven aprendiz en la que fue su primera competición oficial no hizo más que subrayar el buen ojo de su técnico, el único que no se sorprendió del podio de Maira en el Gallego. "Tiene un gran potencial. Su mejor arma es su golpe: seco y rápido", afirma Alonso, para quien la asignatura pendiente de Maira es, por surrealista que suene, su exceso de compasión.

"Me da miedo hacerle demasiado daño a los rivales. Tengo que tener más maldad y menos compasión ya que en el ring nadie tendrá compasión de mi", explica en una declaración de principios que raya el surrealismo. O quizás solamente se aleja del cliché que arrastran los luchadores y que tanto cabrea al subcampeón gallego.

"No me gusta nada que se relaciones este deporte con el vandalismo. Nunca me he peleado en la calle", explica. Ambos, tanto técnico como alumno, defienden la complicación técnica de una disciplina que para muchos es sólo lucha. "Aquí no vale de todo. La técnica, la estrategia y la cabeza son tan importantes o más que la fuerza", explica Alonso. Una buena muestra de ellos la tiene el propio David Maira en su palmarés. En una de las pocas veladas que ha disputado el lucense luchó y venció a un rival que le superaba en más de diez kilos. "Fue la única que vez que sentí miedo al verlo subir al ring tan flaquito frente a otro luchador", recuerda su entrenador.

Es otra de las hazañas de un novato que ha interrumpido con fuerza en los rings. Él se lo toma con calma. "No me gusta marcarme metas, prefiero ir paso a paso".

Full contact

  • "El miedo al KO se te olvida en el ring". Nacido de la mezcla del boxeo con el kárate, el full contact combina los golpes con guantes con las patadas, permitidas de cintura hasta arriba. El objetivo de las peleas es llevar al rival al KO, aunque no es necesario hacerlo para llevarse la victoria ya que cada golpe puntúa de una forma diferente. David Maira nunca ha vivido una KO en el ring, ni suyo ni tampoco de su rival. "Al principio piensas en ello, antes de subir al ring. Pero una vez dentro se te olvidan los miedos", señala el luchador lucense de 22 años.
  • Fuera estereotipos. Asmático desde niño, Maira reconoce que desde siempre le gustó el full conctact. "Te hace sentirte más fuerte", indica, aunque, como otros muchos luchadores rechaza la fama que lleva a cuesta una disciplina que muchos no dudan en señalar más cercana a las artes marciales que a un deporte de contacto. "Este deporte tiene mala fama", reconoce el subcampeón gallego. Su entrenador, el ex campeón gallego David Alonso, es de la misma opinión. "Al gimnasio llega mucha gente que bajo la excusa de aprender el full contact buscan aprender a pelearse en las calles. Esos no duran ni dos semanas", señala tajante Alonso.
  • Una velada en Lugo. Alonso y Maira entrenan una media de tres veces por semana en el gimnasio Argos, una rutina que el joven luchador combina con la carrera de ingenería agrícola. "En exámenes es complicado", reconoce Maira. El sueño de subcampeón gallego y del ex campeón gallego es realizar una velada en Lugo. "Queremos hacer la primera velada de este deporte en Lugo, pero sin el apoyo de las instituciones es complicado. Necesitamos que apuesten un poco más por este deporte", indica Alonso.

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