No hay colores ni escuderías, no hay clasificaciones, ni títulos, ni cronómetro. No hay rivales ni envidias, ni cuentas pendientes, ni trayectoria al volante. Solo hay compañerismo cuando otro piloto sufre un problema mecánico. En el Nacional de Rallyes de asfalto no se hacen cuentas en el momento de ver a un colega de campeonato en problemas. Lo normal no es apretar el acelerador en ese instante, es pisar el freno, bajarse del coche y echar una mano. Así lo hicieron Sergio Vallejo y Cristian García con Iván Ares, que había sufrido una salida de pista en el último tramo del Rallye de Sierra Morena y precisaba ayuda para finalizar la prueba.
"Lo encontré (a Iván Ares) en el último tramo, a muy poco de la meta, y tenía un brazo de la suspensión que estaban intentando arreglar. Soy bastante manitas y me paré para ayudarlos. Es algo que pasa muchas veces y siempre nos ayudamos todos aunque seamos rivales. Con el coche siempre somos compañeros", afirma el meirego Sergio Vallejo.
Vallejo: "Soy bastante manitas y me paré para ayudar a Iván Ares. Es algo que pasa muchas veces y siempre nos paramos para ayudar"
"Tanto Sergio (Vallejo) como Cristian(García) fueron los primeros en parar y asesorarme sobre cómo poder solucionar el problema porque teníamos aún cincuenta kilómetros hasta Córdoba y teníamos que llegar al parque cerrado como fuese", relata Iván Ares.
El piloto coruñés inició el último tramo de Sierra Morena en la segunda posición, cerca del líder y vencedor final, Cristian García. El de Cambre optó por apretar al verse con ritmo suficiente para asaltar la primera plaza, pero sufrió una salida de pista que le creó un problema en una rueda. Ares tenía que recorrer aún unos cincuenta kilómetros para llegar al parque cerrado, ya que de no alcanzarlo no puntuaría.
"No pensé si era un rival o no. Siempre tratamos de ayudarnos entre todos"
"Era un problema bastante complicado porque teníamos una rueda de atrás loca, porque se giraba para todos los lados y el coche era completamente inconducible. De hecho, fui por la autopista casi cincuenta kilómetros y el coche venía casi completamente de lado", valoró Ares, quien añadió que: "La ayuda fue decisiva para solucionar el problema porque de nada habría valido lo hecho en el resto de los tramos si no llegábamos al parque cerrado".
Vallejo, que habría ascendido hasta la cuarta plaza de no finalizar Ares el rallye, no se pensó el parar y tratar de arreglar él mismo el problema mecánico del de Cambre. "No pensé en si era un rival o no. Siempre nos ayudamos entre todos. No pensé en si era rival", comentó Sergio Vallejo.
Ares: "Esto es la esencia de los rallyes. Siempre hay compañerismo en el campeonato"
El propio Iván Ares confirma que el gran gesto del piloto de Meira es algo normal en el universo del motor. "Esto es la esencia de los rallyes. Siempre hay compañerismo. A pesar de ser rivales todos lo haríamos igualmente. Aunque yo no me hablase con algún piloto también me pararía a ayudarlo. Después del rallye tan emocionante que vivimos sería un poco injusto que nos quedásemos tirados. Cualquier compañero haría lo mismo y yo por él, así que en ese sentido estoy muy contento de poder ver el buen rollo que hay en el campeonato".
BALANCE. Tanto Vallejo como Ares, quienes concluyeron quinto y tercero, respectivamente, acabaron el Rallye de Sierra Morena con buenas sensaciones. "El rallye cumplió con nuestras expectativas. Queríamos haber tenido un poco más de tiempo con el coche para hacer algún test la misma semana del rallye, pero no fue posible", consideró el de Meira.
"El objetivo era acabar el rallye porque apenas habíamos probado nada del coche ni habíamos hecho muchos tests. En ese sentido estoy satisfecho porque no me esperaba peleando el rallye hasta el último tramo", manifestó el coruñés Iván Ares.
