El casi fichaje del Chimy Ávila

Petón propuso hace dos años intercambiar a Escriche por Ávila con Huesca y Lugo por medio. 
La operación no salió adelante, los oscenses descendieron y el argentino acabó en el Osasuna
Chimy Ávila, en un partido reciente del Osasuna. EFE
photo_camera Chimy Ávila, en un partido reciente con el Osasuna.

La historia del fútbol está repleta de fichajes frustados. La no llegada de Beckham al primer Barcelona de Laporta es uno y aquel rocambolesco intercambio entre Iniesta y Perea que Frank Rijkaard frenó en un derroche de sentido común, es otro. Cómo olvidar el truncado aterrizaje de Cristiano Ronaldo en el Valencia de la guerra entre los Soler y los Roig o el casi traspaso de Patrick Vieira al Real Madrid con posado blanco incluido en aquella portada del Fifa, la de 2005, que solo vio la luz a través del Marca. Son crónicas que nunca se escribieron, una interminable lista de relatos y contratos olvidados en un cajón en la que el Club Deportivo Lugo, quizá sin saberlo, también ocupa un modesto lugar.

La anécdota ocurre en el mercado de invierno de la temporada 2018-2019 y sus protagonistas son la SD Huesca y un rosarino, el argentino Chimy Ávila (6 de febrero de 1994). Tras un año brillante en Segunda, los oscenses pagan el pato en su estreno en la máxima categoría. Ni Leo Franco, sustituto de Rubi -héroe del ascenso- y apuesta personal de Petón -consejero del club y tertuliano habitual de "El Chiringuito"-, ni el exentrenador del Lugo Francisco Rodríguez, evitan una primera vuelta para olvidar: una victoria en 16 partidos. Las nuevas caras que prometían subir el nivel fracasan y a la dirección deportiva no le queda otra que intentar una revolución en invierno.

Gracias a la serie "Huesca, más allá de un sueño" (2019) que emite la plataforma Prime Video de Amazon, se sabe que Chimy Ávila estuvo cerca del Ángel Carro dentro un intercambio, o así lo quería Petón, por Dani Escriche, cedido en Lugo por los oscenses. La conversación transcurre entre Petón y Josete Ortas, director general del Huesca. «Llama al míster, porque lo tiene que decidir él porque conoce a los dos jugadores, y dile si le vendría bien el cambio de Escriche por el Chimy», dice Petón antes de un silencio sepulcral de varios segundos.

"Pero que no va a salir Escriche, Petón", responde Ortas al otro lado del teléfono. «Que no va a salir, que no podemos hacer que salga Escriche de Lugo», añade, sin poder disimular su cara de incredulidad. Petón no baja los brazos. "El Lugo acaba de fichar a Barreiro. Tienen a Héctor -no había ningún Héctor en el Lugo-, tienen a Barreiro", insiste desde su despacho. "¿Pero Barreiro es Escriche? ¡Pero si son totalmente diferentes!", replica Ortas para enfado de Petón, que interrumpe a gritos el diálogo antes de que el director deportivo, Emilio Vega, en la misma sala que el director general, calme la situación.

DESCENSO Y SALIDA. El resto es historia. Chimy, por supuesto, no se movió del Huesca -ni siquiera podía, era propiedad de San Lorenzo de Almagro- y goleó en la segunda vuelta pese a confirmarse el descenso a falta de dos jornadas, y Dani Escriche solo dejó el Lugo seis meses después. La revolución que intentó Petón no fructificó, Emilio Vega acabó despedido en la segunda vuelta y el argentino se despidió de la que fue su afición durante dos años para fichar por el Osasuna, que pagó a San Lorenzo algo más de tres millones de euros.

Fue en Pamplona donde Chimy Ávila despuntó la temporada pasada. Sus 12 goles en 22 partidos hicieron que en tan solo doce meses pasara de sonar para el Lugo a hacerlo para el Barcelona. Los culés tantearon su fichaje en el último mercado de invierno por la baja de larga duración de Luis Suárez (12 de enero), pero la grave lesión de Ávila contra el Levante (24 de enero) acabó por truncar la operación.

Abidal apostó un mes después por Martin Braithwaite en un traspaso que debilitó deportivamente a un Leganés que ya había perdido a En Nesyri y ocupaba la última plaza de Primera, la misma que el Huesca cuando Petón, para sorpresa de todos, imaginó al de Rosario en el Ángel Carro.

Comentarios