El Breogán tiene la obligación de sumar

El conjunto lucense necesita ganar al Tecnyconta para no quedarse descolgado de la Liga

Cvetkovic avanza ante Llovet en el Breogán-Obradoiro del sábado. J.VÁZQUEZ
photo_camera Cvetkovic avanza ante Llovet en el Breogán-Obradoiro del sábado. J.VÁZQUEZ

QUE EL SUFRIMIENTO iba a ser una constante en la trayectoria del Cafés Candelas Breogán en su esperado retorno a la Liga Endesa es una aseveración asumida plenamente en todo lo que implica y rodea al club lucense. Lo que no se podía prever es que desde el primer día de la pretemporada todo se complicara aún más con el torrente de lesiones que aún lastra al equipo que entrena Natxo Lezkano. Las largas ausencias, jugadores que se reincorporan antes de tiempo por necesidad, el equipo sin estar trabajado adecuadamente... problemas y más problemas que no han hecho más que limitar las posibilidades y dejar al descubierto, posiblemente, más deficiencias de las que a lo mejor se podrían esperar en otras circunstancias.

En definitiva, mirando cara a cara al miedo, al Cafés Candelas Breogán no le queda más remedio que sobreponerse a sus propias carencias y entender que cada victoria implica un gran esfuerzo.

Por esto, el de esta tarde (17.00 horas) en el Pazo dos Deportes ante el Tecnyconta Zaragoza ya no es un partido más. Es uno de los que es obligado sumar porque por mucho que aún resten 25 jornadas más para el final de la fase regular, quedar descolgado en la clasificación a estas alturas implicaría otro esfuerzo añadido. Y probablemente las fuerzas vayan justas.

Hasta ahora es cierto que el conjunto breoganista ha sabido defender su suerte en los partidos disputados en el Pazo y también que en las últimas jornadas ha dado un paso adelante en aspectos fundamentales. Se ha mejorado el trabajo defensivo, se han reducido las pérdidas y en el rebote, y el Breogán ha mostrado una interesante solvencia. Pero, posiblemente, ante un equipo como el Zaragoza esto no sea suficiente.

Una de las preocupaciones de Natxo Lezkano, así lo manifestó, es el ritmo de juego del rival

El conjunto maño llega en una buena dinámica después de vencer en los dos últimos partidos y además a domicilio ya ha mostrado su peligrosidad tras vencer en las canchas de San Pablo e Iberostar, pistas donde por cierto cayó el equipo lucense. Aunque la importancia de jugadores como McCalebb, Stan Okoye, su máximo anotador, o Nemanja Radovic, máximo reboteador y segundo anotador, es innegable, la principal característica del Tecnyconta Zaragoza hay que buscarla en el trabajo de equipo y en su capacidad para sacar partido de las debilidades del rival.

A este respecto, el Breogán tiene un problema. Su pésimo porcentaje en los lanzamientos triples (27,3 por ciento) es una invitación para el rival. Parece evidente que el técnico del Tecnyconta, Porfirio Fisac, al menos inicialmente, no tendrá demasiados reparos en permitir tiros más o menos liberados a los jugadores del Breogán a cambio de intentar limitar los balones que puedan llegar a Jerome Jordan y Volodymyr Gerun, jugadores que en estos momentos son el auténtico sustento de los breoganistas.

La reaparición de Úriz, aunque lejos de su mejor nivel, por lo que representa en la dirección y la mejoría física de Alec Brown podría ayudar a mitigar esos problemas, y más si se suma, con algo de acierto, algún jugador más. Todo esto va a ser absolutamente necesario para optar al triunfo.

Una de las preocupaciones de Natxo Lezkano, así lo manifestó, es el ritmo de juego del rival. El Breogán necesita controlar el ritmo del partido, impedir que el Zaragoza lleve el encuentro a su terreno. Está claro que tanto la limitación de las pérdidas de balón como la lucha por el rebote —muy importante el ofensivo— son dos facetas que tendrán una incidencia muy directa.

El detalle: Bajas relevantes para Breogán y Tecnyconta
Son seguras en la plantilla del Cafés Candelas Breogán  las ausencias de Henk Norel, Salva Arco y Tarence Kinsey, mientras que Sulejmanovic, una jornada más, jugará con molestias en la rodilla.
Desde Zaragoza se anuncian también problemas en el Tecnyconta. Así, Porfirio Fisac ponía en seria duda la participación de Bob McCalebb por molestias en una rodilla. Por su parte, Fran Vázquez se quedó en Zaragoza por un proceso gripal.

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