Altas miras en El Pumarín

A cuatro jornadas para la conclusión de la fase regular en la LEB Oro, tres para aquellos equipos que ya han disputado su encuentro correspondiente a la vigésima séptima, la lucha por la clasificación para los play off se presenta sumamente igualada. Solo hay tres victorias de diferencia ente el tercer clasificado, actualmente el Peñas Huesca, con quince, y el duodécimo, el Amics Castellón, que dispone de doce.

Esto supone que cada encuentro sea, para todos los implicados, un paso adelante o atrás que puede marcar decisivamente su futuro en la competición. Los equipos más afortunados hacen cuentas no solo para conseguir el número de triunfos necesarios para meterse en los play off, sino también para hacerlo como cabezas de serie, es decir, entre el segundo y el quinto clasificado. Eso otorga la oportunidad de afrontar la primera eliminatoria, que esta temporada se juega el mejor de tres victorias, con el factor cancha a favor.

Y en esas está el próximo rival del Cafés Candelas Breogán (domingo, 18.00, pabellón de El Pumarín). Con la clasificación para los play off prácticamente conseguida, el Oviedo juega ahora por la ventaja del factor cancha y con opciones de lograrla no solo para la primera eliminatoria. El conjunto asturiano es el quinto clasificado, pero con el mismo número de triunfos, quince, que el tercero, que en estos momentos es el Peñas.

El conjunto ovetense vive un momento dulce. De hecho, con el triunfo logrado el pasado fin de semana en A Coruña ya ha conseguido el récord de triunfos desde que milita en LEB Oro. La anterior marca la establecieron en la campaña 2013-14, con catorce.

Y esta buena trayectoria ha reforzado la ilusión en el entorno de un club que afrontaba esta campaña con algunas incógnitas. La primera surgía al decidirse por Carles Marco, en las últimas campañas entrenador ayudante en Manresa, como máximo responsable técnico. Seis triunfos en las primeras ocho jornadas ya despejaban cualquier duda y llevaban la tranquilidad tanto al club como a los aficionados.

Con la primera vuelta cumplida llegó otro momento que podría haber sido clave para el Oviedo. Tras la primera jornada de la segunda vuelta su figura, Jordan Swing -en ese momento segundo mejor anotador de la Liga y uno de los jugadores más valorados-, abandonaba el equipo para incorporarse al Cai Zaragoza en la ACB. El Unión Financiera Oviedo ocupaba en aquel momento la sexta posición de la tabla, con nueve triunfos y siete derrotas. Mientras la experiencia no parece que esté resultando positiva para Swing -desde que llegó al Cai apenas ha jugado diez minutos de media en ACB-, para el Oviedo su marcha no resultó traumática ni mucho menos. Es más, para muchos, el conjunto asturiano es ahora un rival más complicado. Ha ganado en consistencia y también en una aportación general de todos los jugadores, aunque es evidente que hombres como Andrés Miso, Ferrán Bassas o Víctor Pérez han dado un paso adelante en cuanto a la contribución dentro del equipo.

El Oviedo suele hacerse fuerte en los encuentros que juega como local. Esta campaña solo ha perdido como local frente a Palencia, Peñas Huesca, Cocinas.com y Melilla.