El estadio de Cantarrana de Viveiro acoge este miércoles el penúltimo test del Lugo de Hernán Pérez antes del inicio de una Segunda División que se antoja sufrida y que exigirá el máximo de una plantilla a la que aún le faltan efectivos.
El Real Madrid Castilla, entrenado por el histórico delantero Raúl González, será el equipo que ponga a prueba al club lucense, que necesita corregir errores en la salida de balón y, sobre todo, encontrar de una vez el tan ansiado gol, que tantos problemas lleva dando al Lugo desde hace años, sobre todo en el tramo inicial de la temporada. A las 19.00 horas saltará al campo un Lugo en el que puede debutar Miguel Loureiro, flamante fichaje de los albivermellos. El lateral derecho de Cerceda hizo una gran campaña el año pasada con el Rácing de Ferrol, consolidándose como uno de los mejores laterales de Primera RFEF. Llega ahora para disputar el puesto a Jordi Calavera en el que será uno de los puestos en los que más cara esté la titularidad.
Se esperan aún dos fichajes, el de un delantero que luche el puesto con un Manu Barreiro que dio el susto en Chaves cuando se quedó tirado en el césped, agarrado a un tobillo, tras una caída en la que Paulo Vítor, portero visitante, se posó sobre el capitán del Lugo. Además, el cansancio durante la temporada es recurrente, y el delantero santiagués necesitará descanso en varios tramos de la misma, y un central que cubra la inesperada marcha de Juan Antonio Ros.
De los jugadores ya fichados, la gran sensación en estos partidos está siendo Zé Ricardo. El lateral derecho demuestra tener un buen trato de balón y mucho atrevimiento en ataque, y solidez en defensa, en la que, a pesar de no ser tan eficaz, pone ganas y lucha cada balón como si fuera el último.
También Carbó está dando el callo, demostrando que no le quema la pelota y que sabe luchar en el barro cuando el rival se hace con el balón. Calavera dispuso de menos minutos, pero demostró que tiene ganas de dar la cara y que creció mucho desde su primera etapa, en la que acabó siendo un jugador muy querido por la afición.
Neyder Lozano empezó teniendo minutos de calidad y demostrando que es un central de raza con muchas cualidades. Sin embargo, en el partido ante el Chaves se le vio algo errático en la primera mitad en lo que se refiere a la salida de balón, regalando el esférico al delantero en alguna ocasión. A pesar de ese error, en defensa marca la diferencia.
Tras esta exigente prueba ante el Castilla, el equipo seguirá la costa mariñana camino a Ribadeo para disputar el último partido amistoso antes del inicio de liga.
El rival será el Rácing de Ferrol, en el que será un partido especial para Loureiro, que se enfrenta a su anterior equipo.
