Adrián Pirata: "Intuí que el rival tenía una lesión grave y eché el balón fuera"

Pensar en un compañero de profesión antes que en el resultado de un partido clave. Pensar en llevar a cabo un comportamiento ejemplar, en ser justo y deportivo por encima de todo, como mamó desde pequeño en Lugo y como lo hace en la actualidad en Compostela. Adrián Pirata no negocia su integridad y lo demostró en la jornada de la Segunda División de fútbol sala del pasado fin de semana, cuando prefirió tirar un balón fuera cuando encaraba solo al portero del Manzanares a la posibilidad de anotar un tanto que habría certificado la victoria en un duelo básico para su club, el Santiago Futsal.

Con 0-3 en el marcador, pero con 10 minutos para el final ante el segundo de la tabla, que se pondría líder de ganar, un jugador del Manzanres intentó controlar el balón cerca de su área, pero resbaló y el baló cayó en los pies del lucense para anotar el cuarto de su equipo y el segundo de su cuenta personal, pero oyó un grito de dolor y tiró la pelota fuera para interesarse por el estado de su rival. El encuentor acabó con 1-3.

Es una décima de segundo el tiempo que tienes para pensar qué es lo que debes hacer. No te paras a pensar en el resultado, sino en el jugado

"En el momento fue lo que me salió. Es cierto que se resbala, pero al instante escuché cómo gritaba e intuí que podía ser una lesión grave. Creí oportuno echar el balón fuera", declaró Pirata. "Es una décima de segundo el tiempo que tienes para pensar qué es lo que debes hacer. No te paras a pensar en el resultado, sino en el jugador, porque pensaba que podía ser una lesión grave", añadió el jugador lucense.

"Es la primera vez que me pasa a mí y a estos niveles. Pero hace poco había visto el ejemplo de Solano, el jugador de Cartagena, que lo hizo en un partido contra Zaragoza. Se quedaba solo contra el portero, pero Javi Alonso estaba lesionado y también la echó fuera. Que jugadores profesionales hagan eso sirve de ejemplo para la categoría base", dijo.

El jugador recibió el agradecimiento de los jugadores del Manzanares y de la afición presente en el pabellón manchego. "El público nos ovacionó al equipo y al finalizar el encuentro nos animaron mucho y nos dedicaron palabras bonitas. Fue una gran reacción que muestra lo bueno que es nuestro deporte".

En el vestuario tampoco tenían dudas de que el gesto de Adrián Pirata era el adecuado. "Todos comentamos que era lo adecuado. Este club nos transmite esos valores. Al final el que tengo que tomar la decisión era yo y lo hice así porque fue lo que me enseñaron a mí desde pequeño". "Al final hay que ser deportivos y pensar en el rival también, en su integridad física", concluyó el futbolista de Lugo.