El Lugo consiguió superar el primer obstáculo en la Copa del Rey, aunque tuvo que sufrir y llegar a la tanda de penaltis para derrotar al Unión Adarve, equipo de la Segunda RFEF. Al contrario que en el estreno copero de hace dos temporadas en Sestao, donde las penas máximas le dejaron apeado a las primeras de cambio, el equipo lucense salió victorioso del Vicente del Bosque, con Whalley, que detuvo los dos primeros lanzamientos del conjunto madrileño desde los once metros, como héroe. Solo el error de Pita, que chutó alto, impidió el pleno de aciertos del conjunto de Rubén Albés desde el punto fatídico.
Aunque el conjunto lucense fue el primero en pisar el área rival con cierto peligro, el Adarve no se amilanó e insufló toda la energía y la intensidad que acostumbra a exhibir sobre el reducido césped sintético del Vicente del Bosque y que tan buenos réditos le ha dado para comandar su grupo de Segunda RFEF. Mayorga cabeceó una falta lateral espoleado por un público animoso y que puso calor en una noche gélida en la capital.
El fútbol directo y la pugna por cada balón en las segundas jugadas convirtió el duelo en una lucha titánica en la que cada pelota dividida era una batalla sin tregua. Los encontronazos y las fricciones fueron constantes y la continuidad en el juego se resintió.
El equipo de Albés supo remontar ante los locales, que volvieron a empatar tras el descanso
A falta de juego elaborado, el Lugo lo intentó con el lanzamiento de media distancia y Vidal probó al meta local al filo del cuarto de hora. No remitió en su ímpetu el Adarve, que dispuso, en el ecuador del primer periodo de una buena ocasión. Portero se infiltró entre los centrales para recibir un envío en largo y viendo a Whalley algo adelantado trató de sorprenderle. Sin embargo, su volea, algo precipitada, se marchó muy alta. Más atinado fue el disparo de Maganto desde la semiluna del área. La pelota salió muy cerca del palo derecho de la meta del Lugo.
No falló el conjunto rojinegro en la siguiente. Portero se quedó solo ante Whalley y, con la zurda, le cruzó el balón por bajo.
JOSELU EMPATA. El gol envalentonó todavía más a la escuadra de Diego Nogales y el mejor remedio para anestesiar la euforia local fue el tanto del equipo de Rubén Albés. Después de no haber dado señales de vida en ataque durante muchos minutos, un centro desde la banda izquierda lo convirtió Joselu en el 1-1 después de un cabezazo certero.
El propio delantero onubense provocó cinco minutos después una pena máxima al anticiparse a Salama que, al ir a golpear la pelota, se encontró a Joselu. Trujillo Suárez no lo dudó y decretó un penalti que Manu Barreiro, con su maestría habitual, transformó en el 1-2 al engañar a Guille.
Volvió encorajinado el equipo de Nogales del vestuario y Montejo falló, completamente solo, ante Whalley. Fue la antesala del empate a dos, logrado por Portero en boca de gol después de un lanzamiento de falta que Mayorga prolongó de cabeza a la zona de peligro. Y cerca estuvo Salama, en otro testarazo, de subir el 3-2. Lo impidió el meta del Lugo con una buena estirada.
Era incapaz el conjunto lucense de controlar el encuentro y Rubén Albés apostó por realizar un doble cambio, pero tampoco la presencia de Hugo Rama como catalizador, que entró junto a Campabadal, sirvió para recuperar el mando del partido.
Puso más empeño el Adarve, que generó faltas y saques de esquina en los que se intuyó el peligro, aunque el Lugo, después de un pase de clase de Hugo Rama, malgastó una buena opción después de que el control de Sebas Moyano fuera defectuoso. Más entero físicamente, los minutos finales fueron de más sensación de superioridad del Lugo. Barreiro se asomó al gol aunque, tras sortear a Calleja, su chut golpeó en un adversario y acabó en córner. Sin embargo, el Adarve no renunció a evitar la prórroga y primero Albur y después un error de Whalley en un balón aéreo pudieron ser letales para los intereses del conjunto lucense, que dispuso de la mejor ocasión para hacer el 2-3 ya en el tiempo de prolongación. Un disparo a media altura de Sebas Moyano desde el balcón del área encontró una atinada respuesta en la parada de Guille.
Disfrutó el cuadro rojinegro de su mejor oportunidad para romper el empate a los 96 minutos. Gallardo, a pase de Albur, rompió el balón desde el interior del área. Por fortuna para el Lugo la pelota se estrelló con violencia en el travesaño. En las botas de Hugo Rama estuvo la mejor opción para los pupilos de Rubén Albés en el primer acto de la prórroga. Guille desbarató el libre directo con marchamo de gol. El portero del Adarve también se lució en un disparo cruzado de Campabadal.
La segunda parte fue del Lugo, más entero físicamente y que supo dar la pausa necesaria para evitar el ida y vuelta. Sus tres intentos de cara a puerta, como un cabezazo de Sebas Moyano, resultaron centrados e inocuos para un Guille muy seguro durante toda la velada. Sin embargo, quien resultó decisivo en la tanda fue Whalley, que detuvo los dos primeros tiros del Adarve y puso todo a favor para que, con los goles de Barreiro, Joselu, Hugo Rama y Campabadal, el equipo de Rubén Albés esté este viernes en el bombo de la Copa del Rey.
Lugo: Whalley Torrado Campabadal, m.69 Castrín Alberto Canella L. Castro, m.84 Iriome Cuéllar, m. 84 Pita Vidal Hugo Rama, m.69 Sebas Moyano Joselu Manu Barreiro.
Goles: 1-0, m.28: Portero. 1-1, m.34: Joselu . 1-2, m.40: Manu Barreiro, de penalti. 2-2, m.50: Portero.
Tanda de penaltis: Por el Adarve marcaron Mayorga, Albur y Calleja, y fallaron Cidoncha y Dani Ramos. Por el Lugo marcaron Barreiro, Joselu, Hugo Rama y Campabadal, y falló Pita.
Árbitro: Trujillo Suárez (Comité Tinerfeño). Amarilla a los jugadores locales Maganto, Mayorga y Salama y al visitante Vidal.
