La injusta derrota de este domingo en Os Carrís acrecenta la maldición que el Rácing Vilalbés tiene con el Barbadás. La falta de puntería, conjugada con una magnífica actuación de Berto y la mala fortuna, fueron determinantes para que el Vilalbés no consiguiese sacar ayer nada positivo.
Los chairegos, que dominaron la primera hora de juego, pudieron ganar, y hasta golear, pero todo lo fallado se les volvió en contra. No consiguieron marcar mientras el equipo ourensano estuvo dormido y cuando despertó, un golazo desde más allá de la línea central sorprendió a Viusky, que no pudo hacer nada más que sacar el balón de dentro de la red. El conjunto rojiverde, que ya había dado por bueno el empate, intentó reponerse del mazazo y acarició el empate con una volea lejana de Sergio Arias que se estrelló en el larguero.
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