Intensidad, concentración, trabajo y, sobre todo, un partido muy serio fue lo que ofreció este domingo el Rácing Vilalbés en el estadio municipal de A Magdalena en la sesión matinal que tuvo que afrontar para medirse a un rival directo en la clasificación, un Deportivo B que lucha por meterse en la zona de promoción de ascenso a Segunda División B, de la que sigue sin apearse de momento el club rojiverde.
El conjunto chairego venció al filial blanquiazul y convenció en su planteamiento y con el juego mostrado, que le llevó a una victoria por la mínima, por 1-0, ante uno de los equipos llamados a pelear por los puestos altos esta temporada.
El estadio de A Magdalena empieza a ser un talismán para el Vilalbés y un martirio para los equipos que lo visitan. De los ocho partidos en los que sirvió como escenario esta temporada, se contabilizan siete victorias locales y un empate, ante el Negreira.
Los chairegos se afianzan en la segunda posición, a tan solo un punto del líder, el Rápido de Bouzas.
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