Gareth Bale trata de reponerse de su lesión lo más rápidamene posible. Para ello, el galés se está machacando en el gimnasio. Primero lo hizo en Cardiff, donde incialmente guardó reposo tras la intervención, pero ahora lo hace en su lugar de trabajo habitual, la ciudad deportiva de Valdebebas.
Lo curioso del asunto de la puesta a punto del futbolista para su pronto regreso a los campos es su compañía. Y es que el jugador acude a su entreno de gimnasio junto Frank Bale, su padre.
Gareth así lo refleja al subir a su perfil de Instagram una foto de Bale senior en la que lleva puesta la indumentaria de entrenamiento del Real Madrid en los vestuarios de la ciudad deportiva.
El delantero no volverá a jugar hasta abril, según las previsiones para su recuperación, por lo que todo parece indicar que los Bale tendrán tiempo de sobra para afianzar su relación paterno filial mientras trabajan los músculos.