El Leche Río Breogán afronta esta tarde (20.45 horas) en el pabellón Pedro Ferrándiz ante el HLA Alicante un nuevo reto, fundamental para mantenerse entre los primeros clasificados de la LEB Oro. Los breoganistas visitan al equipo con mejor racha de la Liga en este momento. El conjunto alicantino es el único invicto de la segunda vuelta y, además, ha ganado sus cinco últimos compromisos, el último sin ir más lejos en la cancha del poderoso Mallorca, además con holgura (63-78).
Esta racha de los jugadores de Pedro Rivero les ha aupado en la clasificación hasta el punto de que si hoy derrotan al conjunto lucense por más de tres puntos de diferencia -en Lugo el resultado fue favorable al Leche Río Breogán por 87-84 lo superarían en la clasificación y si, además, el Melilla no gana su partido en Cáceres, el Alicante se situaría en la quinta posición de la tabla.
Por lo tanto, un Breogán aún dubitativo en sus posibilidades, sin poder contar todavía con el necesario sustituto de Roope Ahonen, el que era referencia ofensiva de los lucenses, y con Mo Soluade, en principio estará a las órdenes de Diego Epifanio aunque con un solo entrenamiento en los últimos diez días, tendrá que superar todos estos contratiempos pero también a un rival crecido y anímicamente muy reforzado por sus últimos resultados.
El Alicante es un equipo claramente evolucionado desde el inicio de la competición liguera. Sus opciones ofensivas ya no dependen en exclusiva del base Justin Pitts y del pívot Bamba Fall, aunque mantienen su evidente protagonismo -el primero es el cuarto máximo anotador de la Liga y el segundo es el más valorado de la competición-, sino que se han ido incorporando jugadores con cada vez más presencia en el equipo. De los últimos cinco encuentros, salvo ante el Melilla, un mínimo de cuatro jugadores del Alicante alcanzaron la decena de puntos. Entre estos jugadores que han dado un paso adelante hay que referirse al escolta estadounidense Devin Schmidt, al veterano base Pedro Llompart -el mejor asistente de la competición, con algo más de seis por encuentro- y a los jóvenes Josep Busquets, Issa Thiam y Alejandro Galán.
MEJORÍA DEFENSIVA. Otro aspecto que hay que tener en cuenta es que el rival de hoy del Breogán a pesar de jugar habitualmente con posesiones cortas ha logrado reducir de forma considerable los puntos encajados en los últimos partidos, hasta el punto de que en los cinco últimos sólo el Canoe fue capaz de superar los 70 puntos anotados.
La importancia de Fall en ataque y los puntos que llegan en sus habituales transiciones -no hay que obviar que es el segundo equipo con más robos de balón por partido- hacen del Alicante como el equipo con mejor porcentaje en los tiros de dos puntos. Ese es un aspecto a tener en cuenta y que obligará al Breogán no solo a tener una especial atención al pívot senegalés, que en Lugo realizó uno de sus peores encuentros de la temporada, sino también al balance defensivo para evitar puntos fáciles del rival.
Desde el perímetro, la defensa del Breogán tendrá que estar muy atenta a la gran capacidad anotadora de Justin Pitts (15,4 puntos por encuentro) y del estadounidense Devin Schmidt -comparte con su compatriota la condición de máximos triplistas de su equipo- que, sobre todo en racha, pueden desequilibrar en cualquier momento.
