Segura recurre al futuro para reírse a carcajadas del presente en Torrente 5

"He hecho cinco películas en 16 años y, aunque soy vago, no me ha dado tiempo a cansarme del personaje", ha bromeado el actor y director de cine Santiago Segura en la esperada presentación de "Torrente 5: Operación Eurovegas", donde sitúa el universo cutre del expolicía en la España de 2018.

"Por primera vez, 'Torrente..' es más coyuntural, al situarla en el futuro he cedido a mi manía de hacerla intemporal (...); las referencias a la realidad creo que ayudan a la risa, porque la gente quiere reirse de las cosas que nos pasan ahora", comenta Segura en una entrevista con Efe.

De hecho, señala, "fue ver cómo estaba de crispada la sociedad, con Bárcenas dando sobres, Froilán que se dispara en el pie y el abuelo con los elefantes lo que me hizo pensar: qué gracioso, y todo dentro del patetismo friqui y la vergüenza ajena, que es el universo torrentiano; comprendí que cada día los periódicos superaban las ideas que se me ocurrían, así que me fui al 2018, que es más fácil".

Un futuro en el que España está fuera de Europa y del euro, vuelven las pesetas con las caras de los reyes Felipe y Letizia en los billetes de mil, el proyecto Eurovegas es sólo un casino y el Vicente Calderón está siendo derribado. Además, Torrente ha tenido a Luis Bárcenas e Iñaki Urdangarín de compañeros de prisión.

Con un despliegue de "amiguetes" aún más amplio si cabe que los habituales cameos de la saga (en ésta es difícil no reconocer a cualquier figurante con media frase: desde Imanol Arias a Gran Wyoming, de José Mota a Falete entre decenas de nombres) el atractivo máximo ha sido "el malo", un espectacular en lo cómico Alec Baldwin.

El actor estadounidense, que habla en un español aprendido fonéticamente en muchos trozos de la película, ha derrochado simpatía y predisposición con los medios de comunicación españoles: "No conozco a los críticos españoles, pero en EEUU son gente que no tiene ni idea de nada", ha dicho a Efe tras explicar con mímica que, por él, podían desaparecer todos.

"Si Santiago quisiera cambiar al drama le criticarían por ello y si siguiera, también", ha dicho Balwin tras afirmar que Segura no sólo tiene talento sino que es "muy divertido y muy rápido de reflejos, y todo con muy buen ritmo", apunta mientras chasquea los dedos.

Segura, que es también su propio director de "cásting", está feliz de haber atinado con Jesús Janeiro, un secundario auténticamente integrado que sólo reniega de los golpes que se llevó durante el rodaje.

"Que no me he quejado, ¿eh?", señala el de Ubrique a Efe. "Nunca hubiese imaginado que yo fuera a hacer Torrente (...) pero yo no vivo 24 horas como torero, yo tengo una vida, y soy un tío abierto, normal, cachondo (...). Por eso me gustó 'Jesusín', me mentalicé y a partir de ahí, pum pum pum. Eso sí, le dije a Santiago que yo, cameo, no; quería papel".

Segura está contento de su irrupción en varios programas de televisión porque le ayuda a que el público "no le identifique tanto" con José Luis Torrente: "Él es cutre, las películas no"; yo diría que técnicamente son muy buenas", se defiende el director, que bromea en la cinta con que nunca le nominen en los Goya, a pesar de que suele reventar las taquillas.

"Yo no quiero saltar taquillas", ha dicho Segura quien, y no solo le parece estupendo el éxito de "Ocho apellidos vascos" sino que cree que "se necesitan ese tipo de éxitos en el cine español" y espera que sea así, una vez más, en el caso de Torrente porque "la gente necesita reirse más que nunca".

La película, sobre todo en la primera parte, es totalmente fiel al Torrente más despreciable, cutre y asqueroso, pero añade elementos tan desternillantes como surrealistas con las incorporaciones de Carlos Areces, que según ha dicho Segura, escribió su propio trozo de guion, Julián López y Florentino Fernández.

López, que, además, tenía el reto de dar vida a un personaje que el público tenía interiorizado con la cara de Gabino Diego, hace una versión del personaje que Segura llama "El Cuco 2.0", dudó al principio, pero enseguida le aportó su "manera de entender la comedia", ha dicho el humorista de "La hora chanante".

A destacar la música de Roque Baños, que vuelve a poner la banda sonora, con un remedo de "goldfinger" cantado por Mónica Naranjo para los títulos de crédito, también montados a lo "007".

Comentarios