La rebeldía asimilada del grafiti

El taller Lugo Mola enseña a los jóvenes un arte que empezó considerándose vandalismo y que ahora no solo es aceptado sino incluso fomentado por las administraciones

Diego Anido ultima el mural de 'workout' en el Parque Rosalía de Castro. SEBAS SENANDE
photo_camera Diego Anido ultima el mural de 'workout' en el Parque Rosalía de Castro. SEBAS SENANDE

Durante años, el arte urbano ha sido visto por las autoridades como un acto de vandalismo, irreverencia y rebeldía. Sin embargo, coger un aerosol y bañar las calles con pintura ha sido desde siempre una de las formas de expresión y protesta más queridas. Hoy en día, los gobiernos han decidido dejar de luchar contra lo que definían como pintadas indiscrimidadas, para pasar a promover su creación.

Lugo Mola es el nombre que recibe el taller de grafiti organizado por el Concello de Lugo dentro del programa +XTI, que trata de ofrecer actividades de ocio alternativo. La actividad, organizada por la asociación Otro Prisma, que trata de impulsar el arte urbano en la capital lucense, se distribuye en cuatro zonas diferentes de la ciudad. Las pintadas tienen el objetivo de "dar y crear valor a espacios que están deteriorados", según apunta uno de los protagonistas de la iniciativa, Diego Aneiro.

Puede atreverse gente de todas las edades, basta con pasar por allí y decidirse a pintar y a crear

Ciudad Norte e Infanta Elena fueron los primeros destinos de los participantes, ambos iniciados el pasado mes de julio. En el Parque Rosalía perdura todavía el olor a pintura. La actividad se desarrolló entre el 30 de julio y el 3 de agosto, día en el que ya se podía apreciar una creación sobre workout pintada sobre un fondo militar cuyas tonalidades combinan a la perfección con el entorno. O Castiñeiro es el último y actual destino, y tratará, como en todos los casos, de resultar innovador. "La actividad que hemos programado para este espacio consiste en, sobre un color liso de fondo, lanzar globos de pintura de colores de gama básica que acaben por realzar imágenes de Jon Lennon, Dalí y Einstein", asegura Diego.

La mayor ventaja que ofrece la actividad es que está abierta a todos los públicos. "Puede atreverse gente de todas las edades, basta con pasar por allí y decidirse a pintar y a crear", explica Anido, aunque por norma general los participantes "se mueven entre los 8 y los 25 años". Otro punto a favor que presenta el taller es que no se requieren conocimientos previos, sino que los monitores tratan de dar la mayor libertad posible a los participantes, guiándolos con instrucciones básicas que han ido adquiriendo con "experiencia de vida".

Lugo Mola permitirá, de este modo, dar un paso más hacia la normalización de un arte infravalorado. "El grafiti está más metido en la sociedad, se ve algo más artístico y poco a poco menos vandálico, aunque aquí queda mucho por mejorar", apunta Diego.

Grafiti
Diferentes estilos y géneros
Sus orígenes se remontan a pintadas inscritas en latín vulgar sobre muros y columnas del antiguo Imperio Romano. Desde entonces, cada cultura ha ido adueñándose del término y sus condiciones, dando lugar a multitud de estilos y géneros diferentes entre los que destacan:
Tag
Plasmar la firma del autor de forma legible y en la mayor cantidad de superficies posibles.
Bubble letter
Letras grandes y redondeadas con relleno y borde.
Throw ups
Letras grandes rellenas de la menor cantidad de pintura posible.
Dirty
Combinación de formas incorrectas y colores repelentes elaborada a propósito
Wild Style
Su símbolo más emblemático es la flecha por el dinamismo que aporta.
Model Pastel
Logra un estilo propio que llame la atención por su complejidad utilizando la tridimensionalidad.

Comentarios