Oliver Laxe, director de la película O que arde, ha asegurado en la Muestra de Cine Español de Tudela que una de sus motivaciones con este filme era “honrar a los ancestros” y ha argumentado que si no se hace eso, “no se llega hasta la raíz” y la persona “se disocia de su esencia”, por lo que buscó que esta película “sirviera como espejo” de la Galicia rural de su infancia.
Laxe, acompañado de la actriz Benedicta Sánchez, ha arrojado esta y otras reflexiones durante la rueda de prensa celebrada en la capital ribera en la cuarta jornada de este ciclo de cine que reúne a destacadas figuras de la producción audiovisual nacional de la temporada, en la que O que arde ha sido aclamada por crítica y público y obtenido premios en citas como Cannes o los Goya.
A ese respecto, Laxe ha celebrado que “una película hecha de manera muy artesanal, a partir de un presupuesto muy bajo”, haya conseguido ser “legitimada por los premios de la industria”. “Hemos confiado en el espectador. No paran de decirnos que estadísticamente se vende otra cosa, pero eso no quiere decir que todos tengamos que vender eso”, ha añadido.
“Buscábamos una película con esa naturaleza artesanal pero también con vocación de público, que no se quedara en uno de los polos característicos del cine español”, ha reflexionado, defendiendo que el cine “tiene tanto alta cultura como cultura popular”.
Oliver Laxe obra el milagro cinematográfico del año con 'O que arde'
“El problema, sobre todo en España, es que es muy difícil hacer estas películas más artesanales, es más difícil tener un negocio con un pan natural, integral, de masa madre, que con bollería industrial, aunque es cierto que ambas visiones pueden convivir”, ha desgranado.
Cuestionado sobre la elección de actores no profesionales para O que arde, Laxe ha señalado que se plantea qué hacer en todas sus películas, aunque ha argumentado que para hacer una película ambientada en el valle en el que vive su madre, del que conoce cada matiz, era “absurdo contar con intérpretes profesionales”.
De hecho, Benedicta Sánchez, protagonista del filme y ganadora del Goya a la Mejor Actriz Revelación hace unas semanas, fue una de esos nombres del reparto no profesional que conforman O que arde, una experiencia que la mujer de 83 años ha definido como una “sorpresa”.
Sánchez ha asegurado que “fue fácil” enfrentarse al reto de la película” y que acudió al casting y a las sesiones de ensayos y filmación “sin miedos, como quien va a una tienda un día cualquiera”, porque “no esperaba ni la lotería ni que le cayeran palos”.
A ese respecto, Laxe ha destacado la “profesionalidad, la implicación y el sacrificio” de Benedicta y de Amador, el otro coprotagonista de la cinta, asegurando que ha sido “un lujo” trabajar con ellos.
Sobre Benedicta, ha afirmado que “hizo crecer el guion” y que ha sido “muy bonito” verla en medio de “toda la parafernalia de los Goya”. “Entre todo el Gucci y el Prada, la gente que estuvo allí se quedó asombrada con ella”, ha asegurado.
