Juan Luis Cano: ''Debería haber más huecos para los espacios de calidad en la televisión''

Guillermo Fesser y Juan Luis Cano comienzan con fuerza el nuevo curso. Yo de mayor quiero ser español es el nuevo programa del equipo Gomaespuma, en el que los archiconocidos periodistas entrevistan a españoles notables, sean más o menos famosos: desde jugadores de fútbol a científicos, cocineros, bailarines, inventores...

Hablamos con Juan Luis Cano de este nuevo espacio, coproducido por Telefónica y Televisión Española, que se emite en La 2 de TVE y en el que se pueden ver cosas ''muy interesantes'', a las que muy pocos programas dan cabida en la actualidad.

PREGUNTA: Un nuevo curso, un nuevo programa. ¿Cómo han cargado las pilas este verano?
RESPUESTA:
Ha sido un verano relajadísimo, por lo menos por mi parte. Por supuesto me he dedicado a pensar y a hacer cosas para el programa, pero también a cargar las pilas y a leer mucho. Muy tranquilo.

P: ¿Recomendaría algún libro de los que leyó este verano?
R:
Si. Recomendaría uno de un escritor canadiense, Robertson Davies. El libro se llama El quinto en discordia.

P: Tras las vacaciones, vuelta al trabajo. Todo lo nuevo hace extrañar algo del pasado. ¿Qué echará de menos del antiguo Gomaespuma?
R:
Extrañar nada, son lenguajes diferentes. Gomaespuma era un programa de radio y esto es televisión: no tiene nada que ver. No extrañaré nada. Es más, la experiencia que nos ha dado la radio nos ha servido y nos va a servir para realizar las entrevistas de una manera diferente.

P: ¿Volverían a la radio con un programa de este tipo?
R:
En principio no se ha planteado. Además, como Guillermo vive en Nueva York sería muy difícil hacer un programa diario.

P: Quizás algo que marca la diferencia entre el antes y el ahora es una idea que Fesser apuntó un día. Dijo: ''Ahora somos mayores. Sí, es más fácil llamar a la gente porque saben quién eres y eso te facilita las cosas''.
R:
Estoy completamente de acuerdo con él. Ahora es difícil que en España, de una cierta generación en adelante, no sepan quiénes somos, aunque no fueran oyentes. Gomaespuma está en el subconsciente de la gente, y eso facilita las cosas a la hora de pedir que te reciban o de solicitar entrevistas.

P: La gente está esperando su regreso, y esto les beneficiará en cuanto audiencia...
R:
Ojalá, ¿no?. Eso acarrea el vértigo de no defraudar. Siempre hemos tenido un público muy fiel, que nos ha seguido mucho.

P: Vuelven a la televisión prometiendo calidad y diciendo que en su programa se oirán cosas que generalmente no se oyen en televisión ''donde impera una filosofía de usar y tirar''. Parecen muy críticos con el medio...
R:
Yo no soy crítico con la televisión. Soy crítico en general, en la vida, con las cosas que no me parecen adecuadas. La frivolidad que se aprovecha de la ignorancia me cae bastante mal, no la soporto. Creo que tiene que haber de todo en la tele, pero debería haber más huecos abiertos para programas de mayor calidad. En este medio ahora prima el presupuesto y la captación de audiencia fácil sobre la calidad. Si un programa necesita hacer músculo para captar audiencia, es difícil que una parrilla de una televisión comercial lo acepte, porque busca réditos inmediatos.

P: ¿A qué se refiere con esas cosas que no se oyen en televisión? ¿Harán un humor diferente?
R:
No humor diferente, yo en eso no entro. Pero sí vamos a dar cabida, por ejemplo, a la ciencia. Hablaremos con científicos que, normalmente, es muy difícil conseguir que salgan de su laboratorio. Nos contarán qué estan haciendo, lo que considero muy interesante. Quitando Redes, no hay ningún programa que esté dispuesto a abrir una ventana a este tipo de cosas.

P: ¿Les gustaría transmitir a los telespectadores el mensaje de que sí es posible hacer las cosas de otra manera?
R:
No, a los consumidores de televisión no. La televisión es muy democrática: hay un mando y cada uno aprieta el botón que quiere. Yo no soy nadie para dar consejos pero, más que a los televidentes, a los que dirigen las cadenas les pediría que se arriesgasen más.

P: En su nuevo programa entrevistarán a españoles que destacan en diversos campos, como las nuevas tecnologías, el deporte, la música, la ciencia... ¿Guarda similitudes por ello con el primer formato de Gomaespuma?
R:
Guarda sólo similitudes en la forma de entrevistar. La experiencia de los 25 años en radio se trasladará a la televisión. Guillermo y yo tenemos una manera muy especial de hablar, de contar las cosas y de entrevistar, y eso, evidentemente, lo plasmaremos en la tele.

OTRA FORMA DE CONTAR
P:
Su sello es sacarle lo cómico a la actualidad...
R:
Tampoco es eso, porque nosotros con el contenido somos tremendamente rigurosos. Es más la manera de contar las cosas, de expresarlas, de preguntar. Está mas en la forma que en el fondo. El fondo lo puede dar el enfoque del entrevistador pero sobre todo el entrevistado. Lo que marca la diferencia es la forma de trabajar.

P: ¿Pero diría que las dosis de humor mejoran la realidad?
R:
La realidad es la que es, no se puede disfrazar. Pero sí se pueden usar buenos vehículos para hacer llegar determinadas realidades a la gente.

P: Está usted orgulloso de su forma de hacer las cosas, ¿no se ha quedado con ganas de hacer otro tipo de periodismo?
R:
No, porque lo habría hecho. Sí hemos estado en redacciones haciendo trabajo de periodistas: redactando noticias, leyendo boletines, haciendo reportajes, fotografías... Llevamos muchos años en la profesión. Elegimos una carrera y una manera de contar las cosas porque quisimos; pudimos habernos quedado allí y no habría pasado nada. Elegimos un camino más arriesgado precisamente para hacer las cosas como nosotros creíamos que debíamos hacerlas.

P: ¿Es importante a nivel personal y profesional luchar por una oportunidad de ese tipo, para realizarse completamente?
R:
Absolutamente. Pero todo lleva sus riesgos. Nosotros optamos por salirnos del periodismo clásico para hacer un programa nuestro, particular, arriesgándonos a que gustara o no gustara. Si no hubiera gustado nos habrian echado a la calle. Lo que no puedes hacer es intentar ser original; si  tratas de inventar cómo ser original es difícil que lo seas. Lo que sí puedes hacer es prepararte mucho y darle a tu modus operandi tu personalidad, con los riesgos que eso conlleve.

P: También ha decidido luchar de otra forma en los últimos años, aventurándose a la política...
R: 
Yo creo que el ser humano debe ser comprometido en la vida. A mí no me gusta que piensen por mí y sobre todo cuando piensan por mí para algo malo; sentirme víctima de abusos sociales o políticos, en este caso. Me vine a vivir a Torrelodones y vi que había una serie de circunstancias que no me gustaban nada en absoluto, que se estaba abusando de mí como ciudadano. Entonces di el paso, y junto a otros que pensaban como yo creamos una asociación de defensa del medio ambiente llamada Torrenat.

Poco a poco nos dimos cuenta de que la única forma de hacer cosas era entrar en la política municipal como partido y así lo decidimos. En las primeras elecciones a las que nos presentamos sacamos cuatro concejales y cuatro años después estamos gobernando. Hemos demostrado en muy poquito tiempo que hay otra manera de hacer política y que, a nivel público, lo que hay que tener es sentido común y ser honesto.

DOS 'CULILLOS' DE MAL ASIENTO
P:
¿Son el compromiso, el hacer y, tal vez el polifacetismo, una forma de vida?
R:
Yo no soy nadie para decir lo que otros tienen que hacer. Guillermo y yo somos dos culillos de mal asiento, y siempre nos ha gustado probarlo todo. Tenemos un espíritu muy renacentista, !otra cosa es que lo seamos¡ Pero sí nos gusta hacer de todo lo que tiene que ver con el entorno de nuestra profesión, con contar cosas e historias. Nunca me pondría a pintar, ni a esculpir, ni sería piloto de Fórmula 1.

P: ¿Algo se les ha quedado en el tintero?
R:
A mí el cine; el cine de verdad, con mayúsculas. Pero voy haciendo cositas, como el guión que estoy adaptando de uno de mis libros... Siempre quedan cosas por hacer, por supuesto, si no, !menudo aburrimiento¡

P: El doblaje, que lo han hecho también en muchas ocasiones, ¿tiene cabida a la improvisación?
R:
Tiene cabida a la improvisación depende de quién seas [ríe], de cómo lo hagas. Cuando nosotros doblábamos pedíamos que nos dejasen hacer la adaptación del guión. Si no, no lo hacíamos. Todos los guiones que hemos doblado han sido así. Cuando estábamos doblando Ali G, el director de doblaje americano, que estaba con nosotros, no entendía porqué no estabamos diciendo lo que ponía en el guión. La verdad esque estábamos improvisando todo, una cosa totalmente absurda. El director de doblaje en español le decía: ''déjales, déjales, que son mucho más graciosos así''. Guillermo y yo estamos tan acostumbrados a improvisar que lo llevamos hasta esos extremos.

P: Quizás la improvisación les permite una mayor conexión con el personaje, como ser parte de él...
R:
  No se puede improvisar sobre la nada. Tienes que tener antes una preparación, tienes que haberte estudiado el personaje. Hay que saber de lo que se está hablando, al igual que cuando improvisas al hacer una entrevista a alguien tienes que saber quién es, a qué se dedica... Una cosa distinta es que tú te prepares un guión y luego lo interpretes, y otra muy distinta es que tú improvises. Tienes que saber de qué hablas, para no hacer el ridículo y para que no resulte absurdo.

P: ¿Y con qué personaje se queda de todos a los que ha puesto voz?
R:
[Duda]... Pues no lo sé... al improvisarlo todo... Había uno, al principio de todo, en la radio, que se llamaba Chema Pamundi y que era un deportista lamentable, al que todo le salía mal. Ese personaje me parecía muy entrañable, me gustaba mucho hacerlo.

P: Siga haciendo memoria. ¿Una entrevista o programa que recuerde con cariño?
R: Especilamente, los programas que hemos hecho fuera, por el mundo, en sitios y lugares especiales, como los de Bosnia, Kosovo o Calcuta, cuando presentamos la primera escuela de la Fundación Gomaespuma. Ese programa es, quizá, el que recuerdo con más cariño.

P: Y ahora echando la vista hacia adelante, ya que los polifacéticos no descansan nunca, según dicen...
R:
[Ríe...] ¡Es que tenemos que buscarnos las habichuelas todos los días!

P: Además del nuevo programa, ¿en qué proyectos los veremos este año?
R:
Vamos a volcarnos mucho con Internet. Estamos haciendo cosas interesantes para nuestra página y también para la de la fundación. Queremos convertirla en un canal de comunicación para ONGs y fundaciones chiquitas, que no tienen posibilidades de contar sus proyectos. También hemos sacado un cursillo de inglés para niños, guiado por el personaje Don Eusebio, de Gomaespuminglish, y hacemos una colaboración en la Ser, muy corta pero que viene muy bien para no perder el contacto con la radio, en A vivir que son dos días los sábados y los domingos. La verdad esque tenemos nuevos proyectos constantemente, Gomaespuma nunca muere.

LABOR POR LA INFANCIA
P:
Ustedes crearon la Fundación Gomaespuma hace ya unos años, ¿cómo ha sido su evolución?
R: La Fundación nació en un momento dado porque Guillermo y yo teníamos a nuestra disposición un medio de comunicación, que era la radio, la cual  siempre creímos que, a parte de para informar y entretener, podía servir para algo más. Guillermo y yo siempre hemos pensado que éramos unos privilegiados dentro de un mundo de privilegiados, y que teníamos la obligación de devolver a la sociedad algo de lo que nos había regalado. Decidimos dedicarnos a la infancia porque la educación es la manera de salir de la miseria real, la única forma de dejar de ser un desheredado. Lo hicimos en Calcuta, en Nicaragua y en Sri Lanka entre otras cosas por dinero: somos una fundación pequeña, sin demasiados medios y en esos países con muy poco se pueden hacer muchas cosas.

P: A pesar de que como dice, es una fundación pequeña y con pocos medios, ¿considera que están cumpliendo sus objetivos?
R:
SÍ, estamos muy contentos. Hace poco estuvimos en Nicaragua, visitando el proyecto que tenemos en Managua, y la verdad es que vives una sensación rara: por una parte estás jodido porque es tristísima la miseria en la que viven pero por otro lado estás contento al ver que los proyectos que tienes allí funcionan muy bien. Es una ambivalencia.

P: Y en el futuro, ¿más proyectos en nuevos países?
R:
No, no. De cara al futuro mantener lo que tenemos que ya es suficiente. No queremos crecer porque no crecer es la única forma de controlar lo que haces. En cuanto creces mucho se te escapa de las manos y nosotros no queremos que eso ocurra, queremos seguir controlando lo que tenemos.

P: ¿Donde estará Gomaespuma dentro de veinte años?
R: Haciendo cosas [ríe], espero. Yo espero no jubilarme nunca. Me gusta muchísimo mi profesión y quiero poder seguir teniendo cosas que contar.

POLIFACÉTICO
P:
Con más de 20 libros detrás, publicados conjunta e individualmente, ¿cómo se define como escritor?
R:
Soy un buen escritor costumbrista; considero que capto muy bien los ambientes y traslado la realidad que me rodea fielmente y de forma entretenida. Me identifico con la frase de Borges ''uno es más responsable de lo que lee que de lo que escribe'', puesto que uno escribe lo que puede pero lee lo que quiere.

P: Escribir a dos voces no es tarea fácil. ¿Se encuentran igual de cómodos trabajando juntos que por separado?
R: Se trabaja diferente. Nosotros estamos acostumbrados a trabajar juntos desde hace más de treinta años y lo hacemos muy cómodos; no supone ningún trauma. Muchas veces la experiencia de haber trabajado en equipo te ayuda a trabajar sólo, porque captas y aprendes cosas del otro que tú no habrías hecho en la vida. Es toda una experiencia para desarrollar un trabajo en solitario.

P: Lo han probado prácticamente todo. Incluso el cine, Guillermo como director y usted como actor...
R:
No, no. Yo como actor he hecho dos gilipolleces. Guillermo sí que ha hecho una película y ha escrito tres guiones. Yo estoy convirtiendo mi última novela, La noche del aguacero, en un guión cinematográfico.

P: ¿Y le gustaría estrenarse como director, o repetir como actor?
R:
Bueno yo he  dirigido alguna cosilla de televisión, pero de cine nada. Y como actor sólo han sido dos papelillos con Javier (hermano de Fesser), y eso no puede considerarse actuar. Además, soy muy mal actor.

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