Pedro escudriña en la ventana con ansia. Pega su diminuta nariz al cristal para ver si entre la inmensidad del cielo puede sentir el aleteo de su compañera de aventuras. Hace un rato que mamá y papá lo prepararon para emprender el viaje. ¡Por ahí viene! Su amiga la gaviota aterriza en su hogar como cada día para llevárselo a recorrer la inmensidad de un mundo por descubrir.
Pedro tiene 3 años y a los once meses le diagnosticaron el síndrome de inversión duplicación del cromosoma 15. Es el personaje de un cuento, pero también es el hijo del escritor sarriano Manuel Darriba, que acaba de publicar un libro protagonizado por su pequeño para sensibilizar y dar visibilidad a la discapacidad infantil. "A idea xurdiu porque me dei conta de que hai moi pouco material literario que faga referencia á discapacidade infantil e quixen aportar o meu grao de area", confiesa.
Así, desde su experiencia como padre de un pequeño con una enfermedad genética de las denominadas raras (afecta a un caso de cada 30.000 nacidos), decidió coger lápiz y papel y ponerse manos a la obra. "Cando lle diagnosticaron a enfermidade a Pedro a vida deunos un xiro total. Para a miña muller Noelia e para min foi un proceso moi duro. Tiñamos que asumir a nova realidade", cuenta. La pareja tuvo que asimilar de un momento a otro que viviría una paternidad "diferente" pero también lo enfrentaron como un reto "que nos ensinou moitas cousas", relata el también guionista lucense.

Desde lo más íntimo y bajo el título Pedro, o piloto de gaivotas (Editorial Belagua) nace este álbum con unas coloridas ilustraciones de Aida Alonso que persigue un doble objetivo: "Por unha banda quero deixar claro que todas as personas teñen que ter un lugar no mundo para vivir felizmente e con dignidade", dice Darriba; y por otro, "recordar que todos os seres humanos dependemos os uns dos outros. A dependencia non é exclusiva en persoas con discapacidade, todos ao longo da vida somos dependentes nalgún momento: desde que nacemos, nos facemos maiores ou temos unha enfermidade", recalca un escritor que se enfrenta por primera vez a una obra dedicada al público más infantil –publicó en el 2010 Brais e os demais, dirigido a niños desde 8 años–.
Pedro, el de carne y hueso, está empezando a dar sus primeros pasos con la ayuda de un andador, le entusiasma la música y escuchar la voz de sus padres leyéndole cuentos es su hobby favorito. Todavía no lo sabe pero también es piloto, un piloto de gaviotas que, seguro, ayudará a volar lejos a muchos niños.