El Festival de la Luz cautiva a Boimorto con energía y seguridad

Un total de 500 asistentes han podido disfrutar de la energía de los artistas gallegos protagonistas de un evento insólito.
El público disfruta de una de las actuaciones en el Festival de la Luz. XOÁN REY (EFE)
photo_camera El público disfruta de una de las actuaciones en el Festival de la Luz. XOÁN REY (EFE)

La edición 'Leiras' del Festival de la Luz, adaptada a la situación sanitaria, ha cautivado este sábado a los asistentes al recinto de Boimorto, que han disfrutado con medidas de seguridad de la energía de los artistas gallegos protagonistas de un evento insólito.

Un total de 500 asistentes han podido disfrutar en un clima familiar de una cita que habitualmente reúne a más de 12.000 personas en la finca natal de la cantante Luz Casal, esta vez dividida en parcelas.

Sin aglomeraciones, ni bailes descontrolados, los afortunados que han conseguido entrada para un evento que las agotó en 24 horas, han disfrutado sentados con amigos y familiares de la espléndida música de Susana Seivane, Boyanka Kostova, Agoraphobia, Terbutalina, Eladio y Los Seres Queridos, Lau y Monoulious Dop.

'Leiras' numeradas, con capacidad para grupos de dos, cinco o hasta diez personas, han sellado las distancias de una calurosa jornada marcada también por las altas temperaturas.

Las integrantes de la banda Agoraphobia, liderada por Susana Saavedra, han sido las encargadas de abrir la cita con un rock alternativo y contundente que ha inmortalizado la fuerza de este reducido festival.
La cantante Susana Saavedra, del grupo Agorafhobia. EFE
Entre concierto y concierto, el caminar hacia la barra ha estado prohibido para estos espectadores que pedían sus consumiciones a través del teléfono móvil y un código QR para recibirlas después por parte de los camareros.

La mascarilla, el gel hidroalcohólico y la desinfección constante de los puntos comunes, como los aseos, han sido las medidas que han completado la seguridad de esta atípica cita cultural, que ha transcurrido durante la tarde, desde las cuatro y media.

La intimidad ha llegado con la voz de la joven artista coruñesa LAU, cuya actuación está organizada por Vibra Mahou, en colaboración con la Fundación Paideia Galiza y la Escuela de Organización Industrial (EOI), con el objetivo de impulsar el emprendimiento del talento musical emergente.

El tercer concierto, el de Boyanka Kostova y su trap gallego ha puesto al limitado auditorio en pie, para bailar, sin moverse de la parcela, al ritmo de los temas Muinheira Interior o Leiraz, con los que los dos compostelanos han dejado toda su garra sobre el escenario de Orros.

El humor ha continuado reinando en la tarde con otro mítico dúo gallego, Monoulious DOP, que ha apostado esta vez por un animado acústico, en el que han entonado temas como Ojalá o Veranito en Jalisia

El coronavirus no ha podido con el Festival de la Luz, aunque su celebración no ha sido una decisión fácil. "Nos costó trabajo decidirnos", ha contado a Efe la madrina del evento, Luz Casal, que reconoce que tiraron la toalla "durante los primeros meses", pero luego pensaron que, cumpliendo "las normativas" podrían sacarlo adelante.

Luz Casal, en el Festival de la Luz. EFE

"La gente que acude a nuestro festival es muy responsable. Nos lo han demostrado en estos ocho años. Saben que esto es una fiesta popular, en la que hay música, en la que hay una serie de cosas para disfrutar y no queremos conflicto", relata la cantante de Boimorto.

Celebrar esta cita con fines benéficos, recuerda, implica poder “dar una ayuda a alguien”, un objetivo que Casal tilda de "importantísimo". El importe de las entradas se destinará este año a Cruz Roja Responde en Galicia, con el fin de ayudar a los colectivos más vulnerables y afectados por la urgencia sanitaria provocada por el covid-19.

Además, la Consellería de Medio Rural ha repartido los "Menús da Luz" para promover en el evento el consumo de 36 productos agroalimentarios gallegos con indicativo de calidad y ecológicos. 

Comentarios