Lugo lució de cine para recibir este martes a la troupe del director monfortino Dani de la Torre, que regresaba a la ciudad tras el estreno de La sombra de la ley, un filme que durante unos días convirtió a la capital en la Barcelona de los años 20, llena de lluvia, niebla, coches de época, gángsteres y mucha acción.
La sombra de la ley traslada al espectador hasta 1921, cuando la Ciudad Condal está sumida en el caos en unos días en los que las revueltas sindicales y anarquistas conviven con el oscuro mundo de los gánsteres, la corrupción policial y el desenfreno y la exuberancia de las noches de cabaret. Un contexto muy diverso y agitado y, hasta ahora, prácticamente inédito en el cine español, en el que el robo de un tren lleno de armas será el detonante de una oscura trama policial.
"Si me dicen hace cinco o seis años que voy a hacer una película como esta no me lo creo. Me han llamado loco muchas veces... desde que me dedico a contar historias", reconocía el cineasta antes de su estreno.
En la tarde de este martes, el Círculo y el público se engalanó para una vuelta llena de afectos. Muy delgado, acompañado de algunos de los actores de la película, subrayó el placer de estar de nuevo en un espacio tan simbólico de la ciudad, "que na película convértese no music hall. Quero agradecer a boa acollida que tivemos todo o equipo e espero que vexades a película, que vos sintades dentro dela", instó a los presentes.
No faltó a la cita la productora de la cinta, Emma Lustres, que quiso dar a las gracias a la alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, y al presidente de la Diputación, Darío Campos, por su acogida del proyecto y por tener tan claro desde el principio que este podría ser "moi beneficioso para a cidade. De feito a película xa está nos cines e está tendo moi boa resposta", indicó.
Además, tuvo un especial mensaje de cariño para todos los trabajadores del Círculo de las Artes de Lugo, "que comprobaron dende cerca o difícil que é facer cine e se portaron moi ben con nós en todo momento".
Al escenario del espacio también se subieron los actores Vicente Romero y Nacho Castaño.
El primero animó al público a ir al cine, porque el último trabajo de De la Torre es "un peliculón", y Castaño habló "do orgullo de estar nunha peli de Dani de la Torre", que también animó a disfrutar en pantalla grande.
De hecho, la segunda parte de la presentación de ayer era el visionado de La sombra de la ley en los cines Abella.
El numeroso público que se reunió en el Círculo aprovechó para charlar con el equipo y hacerse selfies, y aunque los principales protagonistas, Luis Tosar y Michelle Jenner no acudieron al acto, a este le sobró glamour. Quien más quien menos no escatimó en su look, lo que demostraba el cariño hacia una película de la que muchos lucenses se sienten ya parte.
De la Torre reconoce que hace pocos años "era inviable" hacer una película como La sombra de la ley que ahora ha sido posible, principalmente, "gracias ás tecnoloxías e aos efectos dixitais". "Estamos avanzando e estamos abrindo portas. Nosoutros con esta película abrimos unha. O que mola é que seguimos evolucionando e o espectador ten novas propostas".
La sombra de la ley no es una película pura de gánsteres, sino que mezcla otras muchas cosas, como el contexto de la lucha sindical, el mundo del cabaret y también una historia de amor la hace más cercana.
Michelle Jenner, que interpreta a Sara, una de las líderes revolucionarias que lucha en la calle por la equiparación salarial entre hombres y mujeres, destacaba antes del estreno en cines que a pesar de que la trama de La sombra de la ley tiene lugar hace casi un siglo, presenta al público cuestiones que siguen muy vigentes hoy en día: corrupción, desigualdades sociales, machismo...
"Parece que desgraciadamente en cien años hemos cambiado muy poco", señalaba la actriz. "Es muy triste que parece que en aquella época se avanzó más de lo que se está avanzando ahora", apostillaba en la presentación del filme en Madrid Tosar, que coincide con De la Torre en destacar que en aquellos años 20 fueron una época de cambio que contiene importantes claves para entender de dónde viene este país, pero quedaron sepultados por la Guerra Civil.
"Os anos 20 en España foron luminosos, unha época de cambio, de revolta, de reivindicación de dereitos, de festa, da libertade sexual, da irrupción das drogas... pero logo veu aquel Golpe de Estado y fundímonos a negro", opina el director que también coincide con sus protagonistas en desear para el futuro de La sombra de la ley una buena marcha en taquilla antes que un reconocimiento en forma de premios. "Os premios son preciosos, pero eu fago cine para que o espectador vaia velo. Se non... non tería ningún sentido. Sería como abrir un restaurante e que no entrase ninguén, estás solo esperando a estrela Michelín".
