Una pregunta cada vez más frecuente entre los consumidores de cannabis con fines médicos o recreativos, es cómo plantar marihuana en interior, pues quieren cultivarla en su propia casa y dejar de depender de proveedores.
Si bien puede parecer una tarea complicada, lo cierto es que este cultivo es no es tan difícil, pero se necesita contar con una guía como esta que te dejamos a continuación. Así que, si eres un cultivador principiante, te viene bien seguir leyendo.
Elegir el área cultivable
Nada más exitoso como plantar en interior marihuana si se elige el lugar adecuado para esta tarea, por eso, lo primero que debes hacer es reservar un espacio que mida 50 x 50 x 150 cm, en el cual se pueden cultivar varias plantas. Pero, si no tienes mucho espacio en casa o vives en un piso muy pequeño, aun puedes plantar en un área más reducida, aunque es aconsejable solo sembrar una planta.
Puedes escoger prácticamente cualquier área de la casa para cultivar marihuana indoor, dese una habitación hasta un armario. No obstante, debes tener en cuenta que las plantas de cannabis requieren de 18 horas de luz cuando están en periodo de crecimiento y 12 horas al ya estar en floración. Así que el espacio que escojas debe cumplir con esta condición, por lo que debes instalar un sistema de iluminación artificial.
Asimismo, es importante elegir un área en la que no haya mucha humedad y que esté ventilada y entre el aire fresco, algo que puedes lograr con la instalación de un extractor. También, debe vigilarse la temperatura para que esta oscile entre 21 y 25 ºC.
Como se ve, el área para el cultivo no puede dejarse al azar, debe estar bien preparada e incluso deben instalarse aparatos como ventiladores, deshumificadores, calefactores y otros que permitan mantener la humedad, temperatura y ventilación adecuadas.
Seleccionar las semillas
Tan importante como elegir el área de cultivo es la selección de las semillas adecuadas. En este aspecto los cultivadores suelen diferenciar entre las semillas feminizadas y las autoflorecientes. No obstante, las primeras suelen ser las más recomendadas porque en interior crecen rápido y requieren menos luz.
Si lo que quieres es cultivar una variedad específica, para quienes siembran cannabis en interior por primera vez se aconseja empezar con la índica, que crece menos y es más sencilla de cultivar y mantener.
Siembra, sustrato necesario y fertilizantes
Las semillas de marihuana se siembran en interior de la misma forma que en el exterior, pero la cantidad va a depender del espacio que se haya dispuesto. Para que la semilla pueda convirtiese en planta, es necesario que pase por las etapas de germinación de las que se habla en este artículo y que serán posibles si se usa un sustrato adecuado, que es aquel que guarde la humedad al regar, sea aireado, que ayude a la absorción de nutrientes y que contenga pequeñas cantidades de ácidos húmicos y fúlvicos.
En el caso de los cultivos de cannabis, aunque son necesarios los fertilizantes para el crecimiento, se recomienda no agregarlos en abundancia.
El riego
Cuando se trata de regar la planta es necesario el equilibrio y hacerlo únicamente cuando la tierra comience a secarse. Esto puedes comprobarlo tocando con tus dedos suavemente la tierra, si notas que ya no está húmeda, entonces es tiempo de alimentarla.
Este punto es importante que lo tomes en cuenta, porque la marihuana tiende a desarrollar hongos cuando la tierra está muy húmeda, así que no la riegues varias veces al día ni a diario, solo cuando en realidad haga falta.
Dale amor a tu planta
Aunque debes respetar el espacio que has destinado para la siembra, es necesario que no abandones tu planta, ella requiere de tu amor y cuidado. Así que vigila su crecimiento, agrega agua cuando lo necesite, verifica que la luz, la ventilación y la temperatura son las adecuadas. Solo así podrás ver el fruto de tu trabajo.
