Arrestadas dos personas por chantajear y pedir fotos a una menor lucense

Los supuestos autores del delito, un madrileño de 37 años y un menor, publicaron en internet imágenes comprometidas de la víctima

Un menor, con un teléfono. J.VÁZQUEZ - Sexting
photo_camera Un menor, con un teléfono. J.VÁZQUEZ - Sexting

La Guardia Civil imputó en calidad de investigados a un madrileño de 37 años y a un menor como presuntos autores de un delito de corrupción de menores. La operación Voldemort -dispositivo que llevó a la detención de estas dos personas- se inició en la provincia de Lugo a mediados de 2017, después de descubrirse que una menor de edad había entablado conversaciones a través de un programa de mensajería instantánea con una persona que no formaba parte de su entorno cercano.

Al parecer, los presuntos autores del delito lograron, tras varios meses de conversaciones a través de internet, que la víctima les enviase algunas fotografías de contenido sexual.

El chantaje consistía en amenazarla con publicar fotos comprometidas si no les daba más

Una vez que los presuntos criminales se hicieron con las primeras imágenes, comenzaron a presionar para recibir más vídeos y fotografías de contenido similar. Establecieron un chantaje en el que aseguraban a la víctima que, en caso de no enviarles más material, publicarían en las redes sociales las fotos que ya tenían en su poder.

La damnificada accedió en un primer momento a las peticiones de los chantajistas, sin embargo, las fotografías se publicaron de todos modos en un perfil abierto de una conocida red social, por lo que resultaron visibles para cualquier usuario de internet que quisiera acceder al perfil mencionado.

Después de todo este proceso, los agentes rastrearon la red y los dispositivos electrónicos que utilizaban la víctima y los presuntos autores del delito. La colaboración de las compañías telefónicas y las empresas propietarias de las redes sociales implicadas en la evolución del suceso permitieron que los cuerpos de seguridad del Estado localizaran, después de una investigación compleja, el domicilio desde el cual se realizaban las amenazas y se publicaban las fotos.

La Guardia Civil da, en principio, por cerrado este caso, ya que a raíz de todo el material que se incautó en Madrid, se pudo comprobar que, efectivamente, hubo un traslado directo de información de todas las fotografías entre Lugo y el domicilio de la capital de España y, desde allí, se distribuyeron las imágenes a través de las redes sociales.

La víctima es una menor de edad que estudia en un instituto de la provincia de Lugo, si bien para resguardar su intimidad la Guardia Civil no ofreció más datos.

La Guardia Civil explica los riesgos del sexting
La Guardia Civil hizo hincapié en la importancia de estar informado y conocer los riesgos que puede generar un mal uso de las redes sociales, y recordó que el sexting entre menores de edad puede dar lugar a situaciones de chantaje y acoso.

CASTIGO. La difusión de este tipo de imágenes sin el consentimiento de su protagonista conlleva penas de prisión de uno a cuatro años de cárcel. En el caso de menores, la posesión ya es un delito.