Con el equinoccio de otoño, el día y la noche tendrán hoy prácticamente la misma duración. Empieza así la que para muchos es una de las estaciones más bellas del año, el otoño, que este año durará exactamente 89 días y 21 horas.
Concretamente, la nueva estación entra a las 8.50 horas de este mismo sábado y durará hasta el próximo 22 de diciembre, cuando, según datos proporcionados por el Observatorio Astronómico Nacional, se iniciará el invierno.
Pero aunque la nueva estación no ha hecho nada más que llegar, sus primeros cambios ya se pueden notar en los paisajes lucenses, donde los tonos ocre han empezado a ganar terreno y cada vez resulta más frecuente caminar entre hojas secas.

Algunos de los primeros que han podido apreciar estos cambios son los peregrinos que transitan estos días por el Camino Primitivo. Así, los frutos rojos del carnabudo lucen ya en A Fontaneira, mientras que algunos caminantes ya han pisado los primeros erizos caídos de los castaños y por cuyo fruto ya se espera para los primeros magostos.
Y es que, aunque la explosión de color del otoño aún no se ha producido, hay otras muchas señales que indican el inicio de esta nueva estación, como los campos de calabazas maduras -como los que se ven en Baleira- o las primeras setas que empiezan a asomar en los prados cercanos a la ruta jacobea.

El otoño, en todo caso, llega en un día para el que se esperan unas temperaturas más altas de lo habitual, por lo que se anticipa cálido, aunque más lluvioso que el del pasado año.