La traída de Guntín, al borde del colapso por problemas en la captación del río

Los vecinos temen cortes por el insuficiente caudal del río Zamai

Zona de captación en el río Zamai. SEBAS SENANDE
photo_camera Zona de captación en el río Zamai. SEBAS SENANDE

La traída municipal que da servicio al casco urbano de Guntín está al borde del colapso ante las graves deficiencias en la captación en el río Zamai, que se ha quedado obsoleta.

Este afluente del Ferreira se ha quedado casi sin caudal por la sequía, pero el Concello admite que los problemas de suministro de agua no se deben solo a la falta de precipitaciones de este otoño, sino a que esa captación, con medio siglo de vida, no ofrece ya garantías porque no se concibió para atender las necesidades actuales de consumo.

Aunque los vecinos aún no han sufrido cortes, reconocen que les preocupa el bajo caudal del Zamai y también la calidad del agua. De hecho, hasta hace poco, cuando llovía llegaba muy turbia, al llevar sedimentos arrastrados de los prados lindantes con el cauce fluvial. El gobierno local, que teme tener que fijar restricciones al consumo si las cosas no cambian, espera recibir ayuda de otras administraciones para la que ve como la única solución posible: construir una nueva captación, en el río Ferreira, y llevar desde allí el agua al casco urbano. 


El Concello admite que el sistema actual ha quedado obsoleto y urge pasar a surtirse del Ferreira

 


El alcalde, el popular Jesús Carreira Ferreiro, explica que la captación se hizo originariamente en el río Zamai porque era una obra bastante más barata que si se crease en el Ferreira. "Estaba máis cerca para subila ao depósito, o Ferreira está ao dobre de distancia, e daquela non había o consumo actual, polo que a auga que achegaba o Zamai era suficiente", esgrime.

En concreto, desde el lugar de captación actual hasta los depósitos hay unos 300 metros, mientras que la zona del Ferreira hasta donde se quiere llevar ese sistema se sitúa a más de 600.

Sobre los cambios en las necesidades de la población, Carreira estima que hoy en día, medio siglo después de la construcción de la captación, "hai probablemente cinco veces máis consumo" en Guntín, al abastecerse de la traída municipal varias granjas, una residencia de mayores, locales hosteleros, comercios y particulares.

OBRA INAPLAZABLE. Aunque el regidor guntinés admite que hacer una nueva captación —y las consiguientes conducciones desde allí hasta los depósitos— es un proyecto costoso, entiende que no se puede aplazar más esa obra.

Defiende que en los últimos años el Concello realizó inversiones para intentar optimizar el actual sistema, como la ampliación de los depósitos e incluso el arreglo de una presa en el Zamai "para coller máis auga, porque se non sería imposible dar subministro aos veciños".

Añade que ya no se puede hacer más, por lo que tratará de que esa ansiada reforma de la captación, cuyo coste cree que rondará los 600.000 euros, reciba financiación de la Xunta. Dice que en los últimos años realizó gestiones ante Augas de Galicia para transmitir la urgencia de actuar en la traída, y añade que intensificará ahora esos contactos en busca de una solución.

LOS POZOS, SECOS. Los problemas de turbidez en el pasado, sobre todo cuando se construyó la autovía a-54, obligaron a algunos vecinos de la capital municipal a recuperar traídas y pozos de su propiedad. En el sur 
de la localidad, más de una decena de familias dispone, por ejemplo, de una red alternativa a la pública.

No obstante, según explican estos guntineses, los pozos de los que se surtían esas traídas privadas han secado por la falta de precipitaciones, por lo que ya no servirán de alternativa si colapsa la traída municipal. Los afectados viven con preocupación esa falta de caudal en el Zamai y, como el resto de vecinos, demandan una solución definitiva a estos problemas en la captación.

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