Funcionarios del centro penitenciario de Bonxe se concentraron este lunes a las puertas de las instalaciones como medida de protesta por la falta de seguridad en su trabajo. La movilización, convocada por las plataformas Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM), la Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP) y la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) y que contó con el apoyo de compañeros de los centros de Monterroso y Teixeiro, se produjo a raíz de la grave agresión que sufrió el viernes 10 un funcionario que quedó inconsciente y necesitó atención hospitalaria tras haber sido golpeado por un violento interno de gran corpulencia.
El recluso, que llegó a la cárcel de Outeiro de Rei tras protagonizar hechos similares en la prisión de Topas (Salamanca) y que intentó autolesionarse en numerosas ocasiones, padece una enfermedad psiquiátrica. Pocas horas después de cometer la agresión, fue trasladado al centro penitenciario de A Lama, en Pontevedra, ya como interno de primer grado.
La víctima del puñetazo se recupera en su domicilio de las lesiones sufridas, mientras que sus compañeros lamentan la situación que se vive en los centros penitenciarios, donde aseguran estar expuestos a un perfil de recluso más violento.