Conmoción en Rábade por la muerte de Juan Carlos Alonso a manos de su hermano

Víctima y presunto homicida compartían vivienda y su madre había fallecido hacía solo un mes

La Guardia Civil detuvo este sábado a un vecino de Rábade, José Luis Alonso Díaz, de 42 años de edad, acusado de matar a su hermano mayor, Juan Carlos, de 45, en la vivienda que ambos compartían en la Avenida de A Coruña, que está situada en pleno centro de la localidad.

Al parecer, fue el presunto homicida el que llamó a la Guardia Civil para avisar de que había una persona muerta en su casa. Cuando los agentes se personaron en el inmueble, detectaron signos de que se podría tratar de una muerte violenta y no accidental. A falta de la confirmación forense, tanto la documentación encontrada en el domicilio como el resto de indicios les llevó a identificar a la víctima como Juan Carlos, el hermano con el que el arrestado compartía hogar.

Los hechos ocurrieron en torno a las dos y media de la tarde a la altura del portal número 65 de la Avenida de A Coruña, en un edificio de la familia en cuyo primer piso vivían estos dos hermanos y en el que las dos plantas restantes están desocupadas.

El presunto homicida alertó a la Guardia Civil y los agentes vieron sangre en su mano cuando llegaron

Los efectivos de la Guardia Civil que se desplazaron al inmueble, tras recibir esa llamada, se encontraron con que el alertante presentaba manchas de sangre en una mano -al parecer producidas por algo cortante, como una navaja-, que achacaron a un forcejeo con la víctima, y que en el cadáver de su hermano se apreciaban signos externos que coincidían con el cuadro que se presenta en una muerte por estrangulamiento.

Ante ese escenario, los agentes de la Benemérita procedieron a la inmediata detención de José Luis Alonso, que no opuso ninguna resistencia al arresto, y a su traslado a la Comandancia de Lugo.

La Guardia Civil ha abierto una investigación para tratar de esclarecer estos hechos delictivos. El detenido no declaró ante las fuerzas de seguridad, por lo que se desconocen las posibles causas detrás de este homicidio.

Se da la circunstancia de que este suceso violento golpea a esta familia rabadense apenas un mes después del fallecimiento por enfermedad de la madre de estos hermanos, una mujer muy conocida en la localidad al haber trabajado muchos años de peluquera. El padre, que reside en Lugo con el restante hermano de homicida y víctima, se personó en la casa tras ser avisado por la Guardia Civil.

Los dos compartían vivienda y su madre había fallecido hace solo un mes

SORPRESA EN EL BARRIO. El trágico suceso pasó en un primer momento inadvertido para los vecinos de la zona a pesar de la céntrica situación de inmueble, que está ubicado muy cerca de un bar y de un supermercado frecuentados por algunos de los miembros de esta familia.

La llegada de más efectivos de las fuerzas de seguridad, de personal forense y del juzgado y de un coche de la empresa funeraria, para el levantamiento y posterior traslado del cadáver, hizo que en el barrio empezasen a saltar las alarmas y ya se temiesen lo peor. Varios vecinos se acercaron incluso hasta las inmediaciones de la vivienda para, desde la acera y un parque próximo, tratar de averiguar que había ocurrido en el seno de esta familia.

Algunos de ellos pensaban al principio que la víctima podría ser el padre de los dos hermanos, por la edad que en un primer momento se creía que tenía el fallecido, pero cuando se personó en el domicilio familiar junto a otros parientes, tras ser avisados por las fuerzas de seguridad del macabro hallazgo, ya intuyeron que el muerto era uno de los hermanos.

En el barrio estaban muy sorprendidos de lo ocurrido ya que aseguraban que no eran conocedores de que hubiese problemas entre los dos hermanos que hiciesen presagiar este fatal desenlace.

Los investigadores, en la casa de Rábade en la que se produjo el crimen. XESÚS PONTE

Del presunto homicida coincidían en que era una persona poco sociable, que pasaba mucho tiempo en casa y apenas se dejaba ver por la localidad, pero nunca detectaron ningún indicio de que fuese violento. Incluso alguno de los vecinos que seguían este sábado las idas y venidas de los efectivos de las fuerzas de seguridad destacó que era un persona "seria e legal". Al parecer, el arrestado estuvo enrolado varios años en el Ejército y, tras su regreso a Rábade, trabajó de forma ocasional con un maderista de la zona en tareas forestales, aunque desde hace un tiempo estaba desocupado.

Por el contrario, la víctima, que había vivido en esa casa con sus abuelos, ya fallecidos, solía salir más y era habitual verlo pasear o de recados por la villa.

A disposición judicial
A última hora del sábado, José Luis Alonso seguía custodiado en la Comandancia de la Guardia Civil de Lugo, en donde está previsto que permanezca hasta su puesta a disposición del juzgado de Instrucción número 3 de Lugo, sede que también instruye los casos de violencia de género y al frente del que está Sergio Orduña.