La empresa Lácteos de Friol parece que ve la luz al final del túnel. Tras presentar el año pasado un concurso de acreedores, acaba de llegar a un acuerdo con estos para poder seguir adelante con la sociedad y con su actividad.
El juzgado de Primera Instancia número 2 y Mercantil de Lugo ha dado el visto bueno a ese convenio entre la sociedad y los acreedores ordinarios, apenas nueve meses después de la solicitud del concurso. El acuerdo contempla una quita del 50% de la deuda contraída y un plazo máximo de un lustro para saldarla. A los dos años la empresa tendrá que abonar el 15% de esos créditos que han sido reducidos, el tercer año el 25% y en los dos siguientes el 30% en cada ejercicio. Esta quesería de Friol acumula un pasivo de unos 966.000 euros. La deuda sometida a este convenio, a la que se aplicará la quita acordada, asciende a 634.000 euros. La hipoteca de la planta industrial queda al margen. El juzgado destaca en la sentencia que este convenio "representa la única alternativa posible frente a una liquidación de sus activos que, sin duda, por el contexto económico en el que nos hallamos, resultaría lesiva para los intereses del conjunto de los acreedores sociales".
Autorizado judicialmente este acuerdo, la sociedad "dejará de estar intervenida". Si bien, la administración concursal mantendrá su supervisión durante el cumplimiento del convenio.
Causas
El fallo judicial recoge que Lácteos de Friol presentó el verano pasado el concurso debido, sobre todo, a tres motivos. Uno fue la crisis del sector por la reducción de consumo, especialmente en la hostelería por la pandemia. Otro fue el incremento de la competencia y la saturación del mercado con producción realizada con leche foránea. El tercero que esgrime es el aumento de los costes de producción por la subida de precios de la materia prima y la electricidad.
Señala también que actualmente la empresa ha situado "su volumen de negocio en el punto óptimo de equilibro, con un margen inmediato de crecimiento".
