Un dibujo esculpido sobre una roca y que representa una cabeza humana vista de perfil fue el sorprendente hallazgo del historiador Xabier Moure en la zona conocida como Pedrouzos Ribón, en la parroquia friolesa de Miraz y en un lugar muy próximo al grupo de mámoas localizado en el monte Vilaldar.
En este dibujo, en el que según el historiador llama la atención la suavidad de los surcos que conforman la imagen, se aprecia la nariz, la boca, un ojo, una oreja, el cuello y los hombros de una persona.
Sus medidas aproximadas son de medio metro de ancho y uno de altura. Sobre la parte superior de la roca, el historiador también catalogó varias cuevas de cronología prehistórica, aunque piensa que el dibujo puede ser de una época posterior.
Aunque Moure evita hacer conjeturas sobre la probable antigüedad de la obra, sí se pregunta el motivo por el que se encuentra en un lugar que "elixido polos prehistóricos poboadores para enterrar os seus mortos e gravar os enigmáticos petróglifos" y en el que también se encontraron, años antes, tres morteros de piedra. Ha solicitado a Patrimonio su catalogación y al Concello de Friol, la limpieza del entorno.