La educadora del Santo Anxo y el menor que la agredió se recuperan de sus lesiones

Política Social indicó que tras su alta hospitalaria, prevista para viernes por la tarde, ambos volverán a incorporarse al centro rabadés
2020072511464379378
photo_camera Entrada del centro. EP

La educadora social del centro de menores Santo Anxo de Rábade y el menor que la agredió el jueves pasado habrían recibido viernes por la tarde el alta hospitalaria en dos centros sanitarios distintos de la provincia, según informó la Consellería de Política Social, responsable última del funcionamiento del centro.

Desde el departamento autonómico no pudieron precisar cuándo se produciría el alta, pero sí indicaron que estaba previsto que la educadora se incorporase a su puesto de trabajo en la misma tarde de viernes, después de una revisión médica pendiente.

También estaba previsto para la tarde de viernes el traslado del menor, que estuvo acompañado en todo momento por otro educador, a las instalaciones del centro rabadés. Al cierre de esta edición no fue posible comprobar si el alta y el traslado se habían realizado.

El causante de la agresión fue un menor de nacionalidad argelina que ingresó en el centro hace poco más de una semana, y que desde ese momento manifestó una conducta agresiva y violenta, según confirmaron desde Política Social.

La tensión habría estallado el jueves pasado. El menor, según pudo saber este medio, se puso violento y acabó agrediendo a una trabajadora, por lo que fue necesaria la intervención en ese momento de la Guardia Civil y la asistencia médica del 061.

Si bien durante los últimos meses fueron comunes los altercados secundados por un gran número de internos, que se llegaron a causar autolesiones o a agredir al personal de seguridad, en este caso se trató de un episodio de violencia individual en el que los demás usuarios permanecieron al margen.

Desde la Consellería de Política Social confirmaron el conflicto y la existencia de problemas de forma reiterada. Sin embargo, entienden que la inseguridad no se ha incrementado debido a este episodio, por lo que descartan tomar medidas especiales o reforzar la seguridad, algo que sí asumieron hace pocos meses. Actualmente son tres los vigilantes jurados que conforman el servicio por cada turno, uno más en cada franja horaria que antes del confinamiento.

Desde que se decretó el estado de alarma, el centro de menores sufrió episodios críticos con los internos de manera constante, e incluso llegó a vivir un motín los primeros días, en el que los menores destruyeron parte del mobiliario del centro. Las fugas son también habituales, y los menores llegaron a escaparse descolgándose por las ventanas y poniendo en peligro su integridad física.

Los problemas en el centro de menores Santo Anxo no se adscriben al estado de alarma y a la crisis del coronavirus, sino que desde hace años son comunes las fugas de los menores y el porcentaje de los que incurren en actos delictivos en sus salidas es alto. El número de usuarios que residen en el centro en régimen abierto baila de forma continua.

Los trabajadores del centro llevan años manifestando sus quejas ante la falta de medios para atender a menores de perfiles muy distintos y con problemáticas complejas. Algunos de ellos acuden al centro por carecer de entorno familiar que les apoye, mientras que sobre otros pesan ya órdenes judiciales.

Comentarios